El centro social y cultural malagueño de La Casa Invisible sigue esperando una decisión judicial que detenga las pretensiones de desalojo del Ayuntamiento en una guerra fría que requiere más actuación política que judicial. Así lo defienden a ultranza todas las personas implicadas en la salvación de este enclave cultural independiente que, mientras tanto, sigue encontrando apoyos cada vez de mayor consideración. Esta vez del Ministerio de Cultura, que los invita a la vocalía de la Comisión de Trabajo del sector del arte contemporáneo durante los dos próximos años.
Esta comisión ministerial coordinará las líneas estratégicas de actuación en la materia y su finalidad es relacionar a los agentes culturales con la realidad de las instituciones públicas. También impulsar medidas dirigidas a la participación y fortalecimiento del ámbito del arte contemporáneo.
Pero más allá de esto, esta invitación de Cultura supone un paso más en la carrera por convencer al alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, y todo su equipo de gobierno, para que ceda durante unos años este espacio. “Era importante este apoyo porque puede ser un acicate para que el alcalde se replantee la negociación”, resume Floren Cabello, profesor de la Universidad de Málaga.
Este nombramiento es un “reconocimiento a la trayectoria de La Invisible”, defienden desde la organización. La comisión la conforman también, entre otros, los museos Museo de Arte Contemporánea de Vigo y el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía; Mujeres en las Artes Visuales, el Instituto de Arte Contemporáneo o el Consorcio de Galerías españolas de Arte Contemporáneo, entre otras instituciones.
Hasta que no se resuelvan los trámites judiciales, todo el proyecto de rehabilitación más la película sobre el mismo seguirá en el aire. Desde la Invisible, sin embargo, exigen negociación al Consistorio. “Si el alcalde en algún momento ha dudado en que tendrá que estar solo en la negociación, ya sabe que ahora tenemos un apoyo todavía mayor y desde el Ministerio”. A lo que añade Libia Castro: "El Ayuntamiento debería reanudar el diálogo, porque callar es no hacer caso a esta joya con todo por hacer".
El objetivo de esta lucha es lograr la cesión del edificio y demostrar, con la garantía de tener diez años de concesión, que La Invisible es necesaria como punto de encuentro independiente frente a la hegemonía de la Málaga de los Museos.
“Es importantísimo reseñar que después de 15 años, el Ayuntamiento de Málaga debería estar feliz de tener en el centro de la ciudad un espacio reconocido internacionalmente con una gestión porosa fuera de la rigidez institucional, algo los creadores de arte contemporáneo llevamos años demandando», ha expresado la artista Libia Castro, Premio Nacional de Artes de Islandia 2021.
¿En qué punto está el conflicto?
El juez ha denegado la autorización para el desalojo, mientras se resuelve una medida cautelar que presentaron desde el centro cultural para que paralizara el desalojo. Lo cual no quiere decir que el desalojo esté paralizado por completo, sino más bien de manera puntual. “El juez tiene que decidir si tenemos razón. Pero, más allá de lo que decida un juez, esto tiene que resolverse con una decisión política”, insiste Carlos Sanjuán, miembro del Área de Cultura Libre de La Invisible
En las últimas semanas no han tenido comunicación con el alcalde. "Debe dar explicaciones de por qué cambia tantas veces de opinión y promete cosas que luego no va a cumplir", critica Sanjuán. Este mes La Casa Invisible envió una carta al alcalde en la que le instaban a retomar las negociaciones. “Lo tenemos todo para una vez retomado el diálogo se pueda efectuar la cesión que garantice la continuidad del proyecto en el corazón de la ciudad y las malagueñas puedan disfrutarlo al cien por cien”.
Ocho meses después de la amenaza de desalojo, La Invisible continúa buscando apoyos para hacer posible su proyecto de rehabilitación con fondos europeos. Pero todo dependerá de la justicia y la política. Aunque siguen condenando las intenciones del Consistorio como totalmente “politizadas”.
