Este ejemplar, avistado en Israel hace tres semanas, ha sido visto hace unos días en Barcelona por el grupo de investigación Submon. Se trata de un hecho insólito, ya que esta especie está considerada como extinta en el Mediterráneo o el Atlántico. Por los avistamientos tenidos en las últimas semanas, se conoce el rumbo de este mamífero marino que no es otro que el Estrecho de Gibraltar.
Como hipótesis más plausibles de trabajo, se piensa que el animal procedería de la población del Pacífico, que estuvo a punto de desaparecer hace unos 40 años debido a la caza ballenera.
Este animal habría aprovechado el deshielo progresivo que ocurre en el polo norte, se habría desorientado debido a este hecho, y habría acabado en el Atlántico.
Llamamiento
Para el presidente de Circe, Renaud de Stephanis, “La posibilidad de que este mamífero marino atraviese el Estrecho de Gibraltar es algo que no podemos dejar pasar sin hacerle fotos para tratar de identificar a esta ballena, y sobre todo intentar obtener una muestra de piel para identificar genéticamente, y por tanto poder definir si este individuo vendría del Pacífico, o si por el contrario sería un remanente de la población del Atlántico”.
Es por ello que desde Circe se realizó ayer un llamamiento a todos los barcos deportivos, de avistamiento de cetáceos, o usuarios del mar que operen en la zona, “para que en caso de verla, nos avisen a través de los teléfonos de contacto de nuestra página web www.circe.biz”.
De poder conocer todos estos datos de este animal, se podría conocer si la población de ballena gris en el Atlántico está extinta, o si por el contrario, aún quedan algunos ejemplares.