Las inclemencias del tiempo no fueron motivo para que la solidaridad de los vecinos de Jimena de la Frontera no reluciera, ya que fue notable la afluencia de público que se interesó por el evento.
Los asistentes pudieron adquirir desde bolsas de naranjas o de limones hasta vestidos de fiesta, pasando por cinturones de piel, televisores, postres caseros o cerámica artesana, entre otras muchas cosas.
En Jimena de la Frontera residen numerosos extranjeros atraídos por la belleza de la zona, enclavada en pleno Parque Natural Los Alcornocales.