El efectivo policial, perteneciente al grupo de Motoristas, acudía a la calle San Francisco, de la barriada de La Bajadilla, junto con su suegro y sus dos cuñados, uno de ellos menor de edad, al parecer para averiguar el origen de una supuesta agresión al más joven de ellos.
Según las fuentes consultadas, el joven se encontraba practicando deporte en unas instalaciones habilitadas al efecto en la citada zona cuando le abordó un grupo de adolescentes supuestamente de aspecto magrebí para increparlo “por ser familiar de este agente” y lo amenazaron, supuestamente, con cadenas y cuchillos, según fuentes cercanas al caso.
Apedreado
Una vez que el agente y sus familiares llegaron hasta la calle San Francisco, el vehículo del perjudicado comenzó a ser apedreado por un elevado número de desconocidos, quienes se acercaron al grupo de cuatro personas con intención de agredirlos.
Dada la notable situación de inferioridad en que se encontraba, el agente tuvo que solicitar refuerzos para contener al grupo, supuestamente integrado por 18 personas, según las propias declaraciones de uno de los cuatro detenidos.
Durante la reyerta, los cuatro integrantes del grupo del agente resultaron heridos de diversa consideración, todos ellos de carácter leve, si bien el suegro del policía resultó con al menos una costilla rota y uno de sus cuñados tenía en la cabeza una herida que sangraba abundantemente.
Con la presencia policial el grupo se disgregó, y entre los agentes actuantes se logró la detención de cuatro de los individuos: H.A.E.K., nacido en 1984; A.K.C.F., nacido en 1989; un menor de edad nacido en 1993, y A.A.E.K., cuya edad no fue aportada. Todos ellos son de origen marroquí.
Atentado contra la autoridad
Los cuatro detenidos fueron conducidos esa misma tarde a las dependencias de la Comisaría de la Policía Nacional y pasaron ayer mismo a disposición de la autoridad judicial competente.
Las fuentes consultadas informaron de que, en principio, se les acusa de un supuesto delito de atentado contra la autoridad.
Fuentes cercanas al entorno del agente informaron, además, de que el afectado, quien al menos hasta el próximo jueves estará de baja médica, se siente “impotente y muy afectado” por haber visto implicados a sus familiares en un caso “que seguramente tiene su raíz en un ajuste de cuentas por una acción policial anterior”.
Hay que recordar que precisamente este grupo de la Policía Local ha protagonizado en las últimas semanas numerosas detenciones de personas de nacionalidad marroquí relacionadas con el tráfico de estupefacientes. Es por ello que no se descarta que el móvil del atentado contra este agente esté en una supuesta “venganza”.