Con esta norma, el Gobierno acabará con el sistema aplicado desde septiembre de 2008, en virtud del cual el recibo de luz se paga mensualmente a pesar de que la lectura se realiza cada dos meses, de forma que una de las dos facturas se calcula a partir de estimaciones.
En un comunicado, Industria explica que, con la nueva medida, el Gobierno busca que el consumidor pague solo por lo que consume. Además, indica que los clientes que lo deseen podrán mantener el sistema de facturación mensual.
El sistema todavía en vigor, señala Industria, ha generado un importante número de reclamaciones por parte de los consumidores debido a la complejidad asociada a las regularizaciones de los consumos.
En caso de que el consumidor desee seguir con la facturación mensual, la lectura de la energía se seguirá realizando por la empresa distribuidora con una periodicidad bimestral y en los meses alternos en los que no haya lectura real se podrá facturar en función del procedimiento de estimación del consumo de energía eléctrica.
También para facilitar la realización de facturaciones sobre los consumos reales, el proyecto de real decreto introduce la posibilidad de que los consumidores puedan aportar la lectura de su contador en el caso de imposible lectura por parte del distribuidor. Esta posibilidad de lectura del propio contador ya existe en otros suministros como el gas o el agua.