Los municipios sevillanos de Almensilla y Almadén de la Plata han valorado positivamente la puesta en marcha del Fondo Extraordinario de Anticipos Reintegrables (FEAR) en el ejercicio 2012 por parte de la Diputación de Sevilla, aunque han solicitado más información sobre su desarrollo, una petición realizada también por El Coronil, que asegura que "o las cantidades que se nos procure sirven para pagar la deuda completa con proveedores o no podremos salvarnos".
Este fondo está dotado con diez millones de euros para atender las necesidades de tesorería de los municipios y de las Entidades Locales Autónomas (ELA), ayudando a financiar las nóminas de sus trabajadores en octubre, noviembre y diciembre, un fondo que en esta ocasión prestará especial atención a aquellos municipios a los que el Gobierno central ha rechazado los planes de ajuste que tenían que realizar para acogerse al instrumento financiero de pago a proveedores, como son los municipios de Almensilla, Almadén de la Plata, El Coronil y Martín de la Jara, y a los que se prevé retener a partir de septiembre un 50 por ciento de la Participación de Ingresos del Estado (PIE).
En este sentido, el alcalde de Almadén, José Luis Vidal (PP), ha indicado a Europa Press que "todo lo que sea facilitar y ayudar" a los municipios "venga de quien venga, es magnifico". Así, asegura que se presentará para recibir una ayuda "bienvenida" ante la actual coyuntura económica y ha agradecido el "interés" demostrado por la Diputación de Sevilla para atender las necesidades de los pueblos. "Ahora lo que hay que hacer es dar detalles y conocer el proceso pormenorizadamente para poder adherirnos", sentencia.
En la misma línea, el alcalde de Almensilla, José Carlos López (IU), ha señalado a Europa Press que para este Ayuntamiento el dinero supondría "una salvación", ya que podría asegurar los salarios por tres meses. "Nos vamos a poner en contacto inmediatamente con Diputación para conocer las características del FEAR, ya que el año pasado no pudimos acogernos, algo que ahora es muy necesario para poder seguir adelante", añade López, que ha lamentado que "no se tenga en cuenta a los pueblos para negociar las condiciones".
El primer edil de Almensilla, que tiene una deuda de 600.000 euros con proveedores, tiene aún "esperanza" en que no se aplique la retención del 50 por ciento de la PIE, ya que el municipio pasaría de tener un déficit de 60.000 a 90.000 euros, ya que se les retendría unos 30.000 euros al mes, lo que llevaría a "no poder pagar ni las nóminas y rescindir servicios". De aplicarse el anuncio del Gobierno, la retención se le llevaría a cabo durante dos años.
Por su parte, el alcalde de El Coronil, Jerónimo Gerrero (PSOE), ha apostado por analizar la distribución del dinero del FEAR que se realiza, pero advierte de que "sirve de poco todo lo que no sea tener dinero suficiente para la deuda", que en este municipio asciende a 1,3 millones con los proveedores, una cuantía que habría de devolver en seis o siete años. "Lo único que nos puede salvar es que la Diputación nos preste la totalidad de la deuda con proveedores y nos permita devolvérselo a diez años, aunque sea con el mismo interés", agrega
Guerrero, que se ha mostrado "cauto", esperará a analizar las bases de esta convocatoria para ver como se plasma finalmente, subrayando que "si nos quitan el 50 por ciento de la PIE tendremos que cerrar el Ayuntamiento o echar a la mitad de la plnaitlla, algo que no vamos a hacer". "Todo lo que está ocurriendo es muy injusto porque hemos presentado el plan tres veces y otras tantas nos los han rechazado, por lo que parece que nos ha tocado ser uno de esos tres o cuatro ayuntamientos designados prácticamente por provincia para ser expulsados de la medida nacional", sentencia.