El 67,9 por ciento de los votantes suizos han aprobado este domingo en referéndum que los accionistas de las compañías cotizadas puedan forzar una votación y vetar las retribuciones que se asignen a sí mismos los directivos de la empresa. Por contra, el 32,1 por ciento ha votado 'No' a la iniciativa, según los datos publicados por 'Swissinfo.ch'.
La medida, que tendrá forma de una enmienda constitucional, ha sido aprobada tras siete años de campaña liderada por el antiguo empresario y político Thomas Minder, aunque la norma final aprobada previamente por el Parlamento suizo rebaja la propuesta original.
Los accionistas tendrán así voz en las retribuciones convencionales, pero también en los bonus de bienvenida y de fin de relación que habitualmente reciben los directivos. Además, obliga a la empresa a informar a los accionistas de todos los préstamos que se concedan a los directivos.
Recientemente el país se escandalizó ante la indemnización de 72 millones de francos suizos (unos 58,6 millones de euros)que debía recibir Daniel Vasella, expresidente de la junta directiva de la farmacéutica Novartis. Vasella finalmente decidió devolver el finiquito ante la polémica generada.
En el referéndum los suizos han aceptado imponer una moratoria de 20 años en la expansión de los núcleos urbanos con un apoyo del 62,9 por ciento. El 37,1 por ciento de los votantes ha expresado su rechazo a la iniciativa.
Por último, los suizos han votado otra enmienda constitucional para el fomento de las escuelas infantiles, necesarias para mejorar las perspectivas laborales de las madres jóvenes y la conciliación de la vida familiar y laboral. Aunque el 54,3 por ciento de los suizos ha votado a favor, el sistema federal establece que una propuesta debe obtener también la victoria en la mayoría de los cantones, lo que no ha ocurrido.