‘El Lagarto’ sale victorioso en su regreso

Como en sus mejores ediciones. El regreso de ‘El Lagarto’ convirtió el auditorio de La Alameda en un hervidero y en una auténtica fiesta que congregó a más de 2.000 personas. Los chicos de ‘Supersubmarina’ pusieron patas arriba el recinto con un público más joven de lo que solía congregar en su larga trayectoria. Durante hora y media los baezanos dejaron claro porqué se han convertido en una de las mejores bandas de pop del país. Después de aquel decepcionante, en cuanto a público se refiere, concierto del primer ‘Made in Jaén’ también en La Alameda, Supersubmarina recibió por fin parte de todo lo que han dado a esta provincia en lo que a música se refiere, y especialmente, de su trabajo para promocionar el regreso de ‘El Lagarto’. El concierto comenzó con los dos ganadores del concurso. ‘Santo Rostro’, abrió la velada con un hard-rock con reminiscencias a los mejores Black Sabbath de sus inicios y con guiños a grupos como Melvins o Kyuss. Miguel Ortega (guitarra), Antonio Gámez (voz), Alejandro Galiano (batería) y Luis Torres (bajo) demostraron ser una banda compacta bien formada, con una excelente puesta en escena y con un activo en las seis cuerdas de Miguel, que navegó del blues al heavy con verdadera maestría en algunas de sus digitalizaciones. Con ‘The Glassphone’, el otro grupo ganador, el mejor pop británico de todos los tiempos se apoderó de La Alameda. Antonio, Fran y Juanlu, a pesar de algunos problemas técnicos, dejaron el pabellón alto con un sonido más perturbador que el de sus grabaciones y con una versión de Space Oddity, de David Bowie, que dejó patente la brecha entre el público más joven y los más veteranos de ‘El Lagarto’. Los chicos de Jack Knife, que comparten compañía con Supersubmarina, sorprendieron con un concierto vibrante y una puesta en escena arrolladora. Y el fin de fiesta fue de traca con los veteranos 'Eskorzo Afrobeat Experience' en plena efervescencia.