Nadezhda Tolokonnikova y María Aljoyina, las dos integrantes del grupo de punk 'Pussy Riot' que estuvieron en prisión por interpretar una plegaria contra el presidente ruso, Vladimir Putin, en la principal catedral ortodoxa de Moscú, han exigido la liberación de los todos los opositores detenidos en su país por decisión del Kremlin
"Exigimos una Rusia libre y una Rusia sin Putin", ha proclamado Tolokonnikova, después de ser presentada por la estrella del pop Madonna en el concierto de Amnistía Internacional 'Bringing Human Rights Home' en Nueva York.
En 2012, Tolokonnikova, de 24 años, y Maria Alyojina, de 25, fueron declaradas culpables de vandalismo motivado por odio religioso después de llevar a cabo una protesta en la mayor catedral ortodoxa de Moscú, en la que pronunciaron una oración a la Virgen María para que liberara a Rusia del presidente Putin. Después de casi dos años tras en prisión, el mandatario ruso les concedió una amnistía en diciembre de 2013.
Antes de hablar en el concierto, la pareja de integrantes de 'Pussy Riot' se reunió con la embajadora de Estados Unidos ante Naciones Unidas, Samantha Power, para dialogar sobre las tendencias "inquietantes" en Rusia, lo que provocó las críticas del enviado de Moscú ante la ONU.
En el concierto, la pareja trató de llamar la atención sobre el destino de ocho manifestantes rusos que serán sentenciados a finales de este mes después de haber sido acusados de desórdenes públicos en una manifestación de 2012 contra Putin.
Aunque 'Pussy Riot' no actuó en el concierto de AI, la cantante Lauryn Hill, Blondie, y los grupos de rock alternativo Imagine Dragons y Cake sí actuaron en el concierto en el Barclays Center de Brooklyn, en Nueva York.
"De muchas maneras Pussy Riot simboliza el espíritu de lo que Amnistía significa, que es que tomamos la injusticia como algo personal y le decimos la verdad al poder", ha subrayado Salil Shetty, secretario general de Amnistía Internacional, en una rueda de prensa antes del concierto. "No queremos que nadie se deje engañar por lo que está ocurriendo antes de los Juegos Olímpicos de Sochi", ha añadido.
En la misma rueda de prensa, Alyojina ha dicho que no se arrepentía de la actuación que la llevó a la cárcel y que no había duda de que iba a seguir viviendo en Rusia. "Queremos decirle: 'Váyase'", ha asegurado, en referencia a Putin. Tolokonnikova y Alyokhina también han negado que 'Pussy Riot' vaya a disolverse.
"Cualquiera puede ser Pussy Riot. Sólo tiene que ponerse una máscara y organizar un acto de protesta en su país", ha afirmado Alyojina. "Sólo somos dos personas que pasaron dos años en la cárcel por participar en una acción de protesta de Pussy Riot", ha concluido.