Van Lacke y Kuric afinaron (86-80) hoy al "nuevo" Tuenti Estudiantes, al que el base argentino ha dado otro aire desde su llegada hace tres semanas, ante el Bilbao Basket, que jugó a rachas y cavó su fosa en el tercer cuarto con un parcial de 14-0 cerrado con un 29-13 en contra al final de ese periodo.
En las manos de Van Lacke, los colegiales encontraron este domingo el director de juego que tanto ha echado de menos desde que comenzó la temporada. Junto a él, Kuric, con 24 puntos y 23 de valoración, Rabaseda, Miso, Banic, Rubio y la vuelta de Nogueira cambiaron completamente la imagen del Tuenti Estudiantes que, por momentos, hizo el mejor baloncesto de su temporada.
Enfrente, el Bilbao dominó la primera parte, pero cuando parecían tener el choque en sus manos, los de Pueyo, cedieron el rebote (37-30 al final del duelo) y desaparecieron desarbolados por sus rivales en el tercer periodo.
Aún así, "los hombres de negro", con Grimau, Gabriel, con 20 de nota general cada uno, y Mumbrú, con 17 puntos, no dieron su brazo a torcer hasta el final.
El agujero que el Estudiantes tuvo en su zona al comienzo del choque fue rapidamente tapado por el técnico Vidorreta al dar entrada a Rubio por Slokar. Cuatro puntos seguidos del pívot local pusieron por delante a los madrileños: 12-8, en el minuto 6.
Pueyo pidió un tiempo muerto, y la salida de Gabriel y la puntería de Mumbrú devolvieron la ventaja a los de Bilbao, aunque un triple de Rabaseda sobre la bocina en el último segundo del primer cuarto puso al Estudiantes por delante (19-18) en el primer descanso.
Mumbrú, con 10 puntos a mitad del choque, iba a prolongar su racha en la vuelta a la cancha. A su último triple del primer cuarto, extraordinario, con los largos brazos de Nogueira encima, añadiría otros cinco puntos en la reanudación para que los suyos dieran el primer tirón en el marcador (19-23).
Pilepic puso la máxima ventaja a cuatro minutos para el descanso: 26-37, enjugada en parte por Kuric y Nogueira (32-41) mediado el encuentro.
El buen juego de los locales se consolidó de la mano de Van Lacke al comienzo del tercer cuarto con un parcial de 14-0, (46-41) en el minuto 23, con los vascos cargándose de faltas. Gabriel cortó con un triple la racha de su antiguo equipo para mantener junto a Pilepic a "los hombres de negro" (hoy de blanco) en la pelea.
El rebote ofensivo, Nogueira y Rubio fueron dos colosos, y la defensa decantaron el tercer periodo del lado local a ocho para llegar a los 10 últimos minutos con un 61-54.
Otro 8-0 de los de Vidorreta, liderados entonces por Miso, al inicio del último cuarto puso 14 abajo a los bilbaínos: 69-54, a 8 para el final del duelo.
Grimau y Mumbrú, sin embargo, tiraron de casta para devolver el parcial aumentado, un 0-9 y 69-64 a cinco para el término del partido. Casi todo volvía a empezar.
La mano de Kuric reapareció en el momento decisivo para dar el estirón definitivo en un toma y daca con Gabriel tirando de los suyos, Grimau lesionado y el Estudiantes acertando los tiros libres y sabiendo jugar mejor los últimos instantes para apuntarse su sexta victoria de la Liga y cortar una racha de tres triunfos seguidos de los bilbaínos, que se habían impuesto en el Palacio de los Deportes de Madrid en las tres últimas temporadas.
Además, este partido le sirve al cuadro colegial para mantenerse fuera de los puestos de descenso a pesar de la victoria del UCAM ayer en Sevilla.