Javier Pérez y sus amigos tardarán todavía algún tiempo en olvidar el susto que se llevaron hace ahora una semana cuando parte de un árbol se les cayó encima mientras disfrutaban de la noche del sábado en la terraza de un bar de La Constancia, muy cerca de casa. Como relata el joven de 18 años, que fue el que se llevó la peor parte al recibir varios puntos de sutura en la cabeza y un fuerte golpe en la espalda, esa noche “no íbamos a salir”, pero el destino se torció y al final su novia y otros dos amigos dijeron de “tomar algo” abajo. Eran la una menos cuarto y cuando Javi se vino a dar cuenta tenía la rama encima, sólo se percató de un gran ruido. El resto ocurrió en segundos. “Escuché como un chaparrón, fueron tres segundos y ver la rama encima mía (una rama de enormes dimensiones que se equipara a un árbol pequeño, como él mismo explica). En ese momento pensó que de ahí no salía. “Imaginé que el árbol se caía entero encima y me di un fuerte golpe en la espalda, quedando atrapado. Entonces me toqué la cara y me noté mucha sangre”. En el hospital, le dijeron que pese a todo había tenido suerte por poder contarlo, porque un golpe fatal “me hubiera dejado en el sitio”, asegura.
Ahora, él y sus amigos, que sufren magulladuras y contusiones debido al suceso, están estudiando denunciar al Ayuntamiento en calidad de responsable civil por lo ocurrido. Precisamente, a las pocas horas de los hechos desde el Consistorio jerezano se apresuraron a aclarar que estaba previsto iniciar las labores de poda integral en dicha barriada el lunes siguiente y así lo advertían unos carteles informativos, pero Javier niega este extremo y asegura que los avisos se colocaron a raíz de lo ocurrido. “Eso es mentira, no había ningún cartel e incluso un vecino que hizo fotos cuando ocurrieron los hechos pudo comprobar que no había ningún cartel y que estos se pusieron a la mañana siguiente”.
Pese a todo, él y su familia agradecieron la visita de la delegada de Medio Ambiente, Felisa Rosado, que fue a su casa para interesarse por su estado de salud.
Por el momento, tanto él como su novia y sus dos amigos han puesto el caso en manos de un abogado, en concreto el letrado Pedro Pérez, que ya ha requerido una serie de documentación a la Delegación de Medio Ambiente y que se dé parte a la compañía aseguradora. En base a dicha información y de cómo evolucionen las lesiones de su patrocinado, en especial de Javier, decidirán emprender acciones legales por la vía administrativa o la civil.
Su abogado adegura además asegura que el propietario del bar donde se produjo el suceso había puesto en conocimiento del Ayuntamiento la problemática que había con los árboles y que “no consta” que Medio Ambiente hubiera avisado con carteles previamente de que las labores de poda empezaran el lunes siguiente. Un golpe, que, como resalta, amortiguó el toldo del bar, y que ha dejado un traumatismo encefálico leve a uno de los jóvenes, además de contusiones, arañazos y dorsolumbalgia.
