Loles López ha visitado esta semana la provincia de Cádiz. Eligió el interior, la Sierra, para realizar un recorrido que le llevó por diferentes municipios en los que puso de manifiesto la razón de ser de su vocación política, la del contacto directo con la gente desde una subrayada cercanía que elogian sus compañeros de partido y desde la que pretende tumbar las etiquetas con las que se ha extendido cierto estereotipo del militante popular. Su primer toma de contacto es en Arcos, a donde llega directamente desde su Valverde natal.
Es curioso que dos provincias que se rozan y tienen tanto en común estén tan distantes una de la otra por carretera, ¿cree posible que en un futuro Cádiz y Huelva puedan estar conectadas o son demasiados los inconvenientes medioambientales?
—Cádiz y Huelva tienen un gran potencial, pero las vías de comunicación son imprescindibles, y yo creo que si ambas provincias estuviesen conectadas por carretera eso provocaría un revulsivo económico muy importante para ambas. Yo espero que en un futuro podamos llevar a cabo ese proyecto, porque la cuestión medioambiental, a la que siempre ha recurrido la Junta para rechazar la idea, no ha sido más que una excusa. Aquí en la provincia tenéis el Parque de los Alcornocales y lo atraviesa una autovía, y se ha compatibilizado perfectamente la protección del medio ambiente con la existencia de una vía de comunicación, por lo que lo mismo debe ocurrir con Huelva y Cádiz y espero que eso suceda en un futuro, aunque me temo que habrá que esperar, mientras siga existiendo un gobierno socialista.
Visita una provincia que fue pionera en lograr la alternancia en ayuntamientos históricamente gobernados por el PSOE. Arcos, precisamente, fue el primero de ellos. En su caso logró la alcaldía tras 32 años de gobierno socialista, ¿cómo evalúa su experiencia hasta el momento?
—Podía usar muchos calificativos. Es una experiencia bonita, porque conseguir ese respaldo de tus ciudadanos y que te den su voto de confianza, eso hay que vivirlo. Es un reto personal tremendo, pero tampoco puedo ocultar que ha sido duro. Desgraciadamente nos dejaron el pueblo más endeudado de España, proporcionalmente. La situación era tal que de lunes a viernes gestionábamos la labor diaria del Ayuntamiento y cuando llegaba el viernes por la tarde nos poníamos a pintar el cementerio, a limpiar parques, a podar árboles, a limpiar las calles, porque no teníamos recursos ni para eso. Ingresábamos unos 25.000 o 30.000 euros mensuales, y el Ayuntamiento tenía unos gastos comprometidos de 800.000 euros mensuales. Pero después ha sido gratificante, de hecho me vuelvo a presentar como candidata a la Alcaldía, porque es una de las experiencias más bonitas en política, y quien tiene vocación política sabe que ésa es la política directa, la auténtica, la del contacto con el ciudadano y eso te lo permite el trabajar en tu ciudad.
Cuentan que Juanma Moreno la eligió por su conexión con el mundo rural e interior de Andalucía y porque representa también el cambio generacional dentro del PP andaluz. ¿Tiene usted la clave para conseguir que el PP gane votantes en poblaciones de un casi fidelizado voto socialista?
—Yo conseguí la Alcaldía de Valverde del Camino después de 32 años de gobierno socialista, y yo creo que la solución es aplicar lo que yo apliqué en mi pueblo. La gente puede tener rechazo a las siglas del PP quizás porque nosotros no hemos sabido transmitir bien nuestros proyectos, nuestros valores, nuestro esfuerzo, nuestro trabajo, nuestros deseos de futuro para las provincias o para Andalucía entera. Yo creo que la forma mejor de transmitir lo que somos el Partido Popular es el tú a tú, hablando directamente con las personas, acercándote a ellas, acudiendo a sus casas. Yo lo hice, visité a todos los vecinos de Valverde, uno por uno, durante más de un año y medio. Hay que sentarse con los mayores en los parques, hablarles, cogerles la mano, sentir lo que ellos sienten y explicarles lo que eres tú, y verán que somos personas con ilusión, con ganas y con proyectos, y eso hay que hacerlo sobre todo en el interior de Andalucía. Afortunadamente eso ya lo están haciendo muchos compañeros del partido, que son muy valiosos y están poniendo de manifiesto que somos personas normales y corrientes y no como otros pretenden etiquetarnos.
Acaban de publicarse los datos del desempleo y ya sabrá que la provincia de Cádiz sigue siendo la más castigada del país, ¿qué falla para que las cifras se reduzcan a un ritmo muy inferior al que se está alcanzando en otras regiones?
—Lo único que le pasa a Andalucía para no lograr mejores resultados es su presidenta. Cuando alguien tiene responsabilidad de dirigir un municipio o una comunidad autónoma lo que tiene que hacer es gestionar, y lo que no es posible es que el Gobierno de España esté tomando medidas y haciendo reformas que dan resultado en toda España menos en Andalucía, o que en Extremadura tenían la misma tasa de desempleo que en Andalucía hace diez años y ahora la han reducido en diez puntos, mientras en Andalucía seguimos casi con la misma tasa de paro que hace unos años. El problema es la presidenta, que no gestiona, porque no quiere, porque no sabe o porque no puede, y porque sólo tiene una obsesión personal que es Madrid y ésa es su gran ambición política. Está tan obsesionada que se ha convertido en una presidenta de papeles couché y con titulares como los que ella da no se solucionan los problemas de los andaluces, lo que hay es que gestionar. No es que no se haya llevado a cabo ninguna reforma en Andalucía, es que la ejecución presupuestaria de 2014 a fecha de 31 de octubre en políticas de empleo y de inclusión social sólo se ha ejecutado un 35% de los previsto. Dónde está el resto del dinero, qué ha hecho con él, porque con la partida de servicios de presidencia, destinada a su promoción personal, se ha ejecutado en un 80%. Pero es que hoy se ha publicado que desde el año 2007 y hasta la actualidad, el gobierno de la Junta ha dejado de ejecutar en empleo 3.000 millones de euros. Qué está ocurriendo con los cursos de formación que están paralizados desde 2011 a pesar de que el Gobierno de España ha transferido casi 500 millones de euros para su desarrollo. Por qué tenemos que devolver ahora 240 millones de euros de formación a Europa, precisamente, por una errónea gestión. Cuando alguien tiene otra ambición y por encima de todo está su imagen y ella misma, es muy difícil ayudar a los demás, porque no te preocupas de ayudar a los demás, y eso es lo que está pasando en Andalucía. El principal problema de Andalucía es la señora Díaz, pero el principal problema de la señora Díaz es ella misma.
Van a presentar en el Parlamento un plan de industrialización, ¿confían en que sea bien recibido por el Gobierno autonómico o ya temen el no como ocurrió con el pacto por el empleo o la reforma fiscal?
—Lamentablemente creo que la señora Díaz no va a informar favorablemente a esa iniciativa, pero lo digo por experiencia. El PP ya le ha ofrecido a la señora Díaz un pacto por el empleo, ya que ha demostrado que no es capaz de ejecutar siquiera los presupuestos en materia de empleo, y no lo aceptó. Le ha ofrecido también un pacto para luchar contra la corrupción, y tampoco lo ha aceptado; le ha ofrecido una reforma fiscal con bajada de impuestos, para que todos los andaluces tengan de media unos 450 euros más al año en el bolsillo y tampoco lo ha aceptado. Es la señora del no. Y ahora les hemos presentado este plan de industrialización, que es un plan muy potente, que lucha por Andalucía, ya que hemos perdido 7.000 empresas en los últimos años y cien mil puestos de trabajo. No sólo tenemos la materia prima, sino que hay que industrializarla. Así que esperamos el no por respuesta, y sobre todo porque estamos convencidos de que a la presidenta le preocupa poco Andalucía, y lo digo con tristeza, porque es una gran tierra, y lo peor es que no conoce la realidad de Andalucía, y cuando se la acercamos al Parlamento y se lo ponemos fácil y le hacemos el trabajo, también dice que no, ni siquiera se molesta en mirarlo.
Denunciaba hace unos días que la Junta ha suprimido el apoyo financiero previsto para las pymes industriales, ¿conoce si el Gobierno autonómico tiene previsto un plan B o simplemente no hay fondos para mantener la promesa?
—Desgraciadamente no hay un plan B. Ya lo he dicho antes, Andalucía no puede vivir de los titulares de la señora Díaz, porque cuando ves la realidad te das cuenta de que esos titulares se han convertido en una promesa incumplida más. Anunció en octubre de 2013 un plan de apoyo financiero a las pymes, lo volvió a anunciar en noviembre de 2013, y en diciembre se aprobó el real decreto al respecto. Lo anunció como un plan urgente dotado con 150 millones de euros, pero cuando se materializa vemos que ya no es sólo para un año, sino para dos, y además la sorpresa fue ingrata, sobre todo para el sector, porque para 2014 lo que se presupuestaban eran 58 millones de euros que ya estaban. Pensábamos que el plan era algo nuevo. Pero el engaño se ha agudizado aún más porque en octubre de 2014, esos 58 millones de euros se han quedado reducidos a 2,2 millones, ya que ha destinado el resto al plan de construcción sostenible. Pero es que a la fecha que estamos ni ha ejecutado los 2,2 millones previstos ni los 55,8 para el plan de construcción. La cosa no ha quedado ahí, ya que cuando hemos acudido al presupuesto para 2015 hemos comprobado que ha eliminado el plan financiero, con lo que de los 150 millones prometidos nos hemos quedado en 2,2.
Está visitando una zona de la provincia en la que cada vez hay más ejemplos de turismo rural, ¿cómo creen desde el PP que hay que contribuir a su potenciación?
—Hay tres cuestiones fundamentales para potenciar el turismo rural, y para ello lo primero que hay que hacer es ejecutar los presupuestos, ya que si no cumples con la cifra que dibujas en un papel no vale para nada. Segundo, las infraestructuras. Para potenciar turísticamente este interior tenemos que facilitarle al turista la conexión para que se acerquen a disfrutar del patrimonio de que disponemos. Y tercero, no puede ser todo basado en una campaña publicitaria para la señora Díaz. Lo que hay que publicitar es Andalucía. La difusión, las vías de comunicación y la ejecución presupuestaria son fundamentales para contribuir al desarrollo del turismo.
Su presidente regional ha comparado la situación política de Andalucía con una bicicleta tándem: ¿Usted se ve en uno de los asientos y en otro a alguien del PSOE en un futuro próximo?
—La verdad es que para que cambie y mejore la situación de Andalucía, vista la falta de gestión actual, quien tiene que llevar el manillar en esa bicicleta es Juanma Moreno, y está ofreciendo pactos continuamente a la señora Díaz para que se suba a esa bicicleta a pedalear conjuntamente, pero ella no está dispuesta a pedalear por Andalucía, ni a agachar el lomo y trabajar por Andalucía. Para que mejore la situación todos tenemos que sumarnos, pero quien tiene que llevar el manillar de esa bicicleta es Juanma Moreno.
¿No tendría inconveniente entonces en compartir la bicicleta?
—La sociedad nos está pidiendo a los grandes partidos que pactemos en cuestiones fundamentales como el empleo, contra la corrupción, en sanidad, en educación... y Juanma Moreno le ha ofrecido a la señora Díaz muchos pactos para ponerlo en práctica, pero el problema es que la presidenta está más cerca de Podemos que del centralismo, y nosotros somos un partido de centro que queremos una mayoría social en la que participen los andaluces
¿Aunque ella diga que se encuentra tan distante de Podemos como de ustedes?
—Yo creo que ella no tendría ningún problema, ya que su ambición personal la lleva a ello, con tal de no perder el sillón, y estaría abocada a un pacto con Podemos.
¿Cree que habrá elecciones anticipadas en Andalucía?
—Esa es una decisión de la presidenta, pero sí tengo que claro que ella decidirá la fecha de las elecciones autonómicas cuando le convenga a ella, no cuando le convenga a Andalucía.
A ustedes solo les vale la mayoría absoluta, como quedó demostrado en las pasadas elecciones, ¿cuál es su hoja de ruta a partir de ahora si tenemos en cuenta que las encuestas no apuntan de momento a esa posibilidad?
—La que estamos haciendo. Aquí hay dos modelos. Uno es el de Juanma Moreno, con una obsesión, que es Andalucía, y el modelo de Susana Díaz, que es una obsesión por Madrid y por ella misma. Y a partir de ahí los modelos se distancian mucho. Juanma Moreno ofrece pactos y la señora Díaz a todo dice que no. Juanma Moreno ofrece soluciones y la señora Díaz ni gestiona ni ejecuta los presupuestos. Juanma Moreno está todos los días en la calle escuchando a los ciudadanos, con todos los sectores económicos y profesionales, haciendo propuestas... y la señora Díaz vive en el papel couché y en las alfombras rojas. Hay dos modelos muy diferenciados.
¿Piensa que la figura de Antonio Maíllo puede frenar en Andalucía el auge de Podemos o la pérdida de votos de IU en favor de la nueva formación política?
—Yo creo que la figura de Antonio Maíllo no está clara, y no lo está porque ni ellos mismos saben lo que quieren. Ha sido sorprendente que el señor Castro, que está gobernando de la mano con la señora Díaz, dijera abiertamente que el PSOE llevaba en su adn la corrupción. Oiga, que usted está gobernando con ese partido. El otro día propuso la apertura de comisiones de investigación. No, mire usted, el PP ha propuesto numerosas comisiones de investigación a las que usted y el PSOE han votado que no; y hemos solicitado documentación en el Parlamento que nos han vetado tanto el PSOE como IU, y hemos llevado un pacto contra la corrupción con un conjunto de medidas, e IU y PSOE votaron que no. Creo que el problema que tienen es que no saben lo que quieren, salvo el hecho de conservar el sillón a cualquier costa.
¿Cómo evalúa la labor realizada hasta ahora por Juanma Moreno y dígame si lo ve de candidato a las autonómicas o si como ya se rumorea el partido planteará primarias en busca de alternativa?
—No lo veo de candidato, lo veo de presidente de la Junta de Andalucía, y perdón por exponerlo de forma así tan directa. Creo que es evidente. Que cómo evalúo su trayectoria, pues no ha parado ni un momento. Está todo el día en la calle, y a lo mejor no se ve mucho en los medios, o a lo mejor sí, pero es que es muy diferente. Juanma lo que quiere es estar con la gente, escucharla, compartir con ellos, proponer soluciones a sus problemas. A él lo que le gusta es pisar el terreno y conocer la realidad, y eso es lo que lleva haciendo desde que fue nombrado presidente del PP andaluz, y sobre todo tendiendo la mano y poniendo soluciones encima de la mesa, que otros señores prefieren no escoger y seguir en la comodidad y resignados a vivir el pasado o una y otra vez el presente, y esto es muy distinto. Juanma Moreno no se resigna a que Andalucía siga siendo la última, y está empeñado y obsesionado porque sea la primera mientras los demás se resignan a que todo siga igual porque le viene bien a ellos mismos.
Susana Díaz se presentó como la principal luchadora contra la corrupción, sin embargo desde la opinión pública no se aprecia la contundencia ante la aparición de nuevos casos.
—La señora Díaz ha perdido totalmente el debate en la lucha contra la corrupción. En primer lugar porque la ciudadanía pide pactos y medidas y ella se ha negado porque necesita pastelear y tener las manos libres para cambiar el discurso en función de sus intereses personales. Ha perdido toda la credibilidad cuando hemos podido comprobar todos los españoles y los andaluces cómo le ha dado un giro a su discurso cuando ha visto a los señores Chaves y Griñán en el Supremo. Ya sus palabras cuando eso ha ocurrido eran otras, ya no valía lo que había dicho días antes. Pero es que además no puede tener credibilidad en la lucha contra la corrupción alguien que cuenta entre sus diputados con personas que están señaladas por la justicia por temas de corrupción económica. No puede tener credibilidad cuando tiene personas próximas de su equipo que están señaladas por la justicia, pero sobre todo es que es una contradicción en sí misma. Dice por un lado que la justicia tiene que acelerar todos los procesos, pero es que es la justicia la que lleva más de dos años esperando que la Junta le entregue toda la documentación de los ERE. Todo dista mucho de las palabras a los hechos. Son, e insisto, dos modelos diferentes: Juanma Moreno actúa, Susana Díaz interpreta. Y lo que necesita Andalucía son actuaciones y hechos.
¿Deben dimitir Chaves y Griñán?
—Ya no sólo por el hecho de que tenga que decidir lo que sea el Supremo. Lo que es inadmisible es que estamos hablando de casi mil millones de euros que se han perdido, que era dinero de los parados, y que no han sido controlados por dos expresidentes de la Junta, y sólo por eso deben dimitir.
¿Han abierto alguna investigación interna tras las sospechas dirigidas contra miembros de su partido por el tema de Fitonovo?
—En nuestro partido no existe ninguna vinculación de la que tengamos constancia a día de hoy con el tema de Fitonovo, absolutamente ninguna. Por tanto, quien tiene que dar explicaciones en ese sentido son el PSOE e IU, que precisamente están al frente del gobierno andaluz.
Les han acusado esta semana de dañar la marca Andalucía al acudir al Parlamento Europeo y pedir que se investigue el uso de los fondos europeos que recibe la Junta...
—Nosotros no hemos dañado la imagen de Andalucía, pero eso tiene una lectura clarísima. Cuando la señora Díaz ha salido tan dolida diciendo que no tenemos por qué pedir información sobre los cursos de formación y transparencia sobre esta cuestión, lo que ha dejado claro es que no quiere la transparencia, que era lo que pedía Juanma Moreno, transparencia y buena gestión de esos fondos. A qué le teme, si lo ha gestionado bien por qué no quiere transparencia. Quizás porque esos fondos no están llegando nunca a la ciudadanía porque hay una trama de corrupción con los cursos de formación y porque lo han gestionado tan sumamente mal que ahora tienen que devolver 240 millones de euros porque no han sabido gestionarlo bien.
Hablando de fondos, la presidenta de la Junta le ha remitido una carta a Mariano Rajoy en la que le establece las prioridades de Andalucía y le pide que facilite la llegada de 13.000 millones de euros del plan de impulso económico de la Unión Europea. ¿Qué le parece la petición o cuáles serían sus prioridades para Andalucía con ese dinero?
—Siempre vamos a estar del lado de los andaluces, y nuestros aliados son los andaluces, pero sorprende que pidan eso porque en materia de empleo a 31 de octubre sólo han ejecutado el 35% del presupuesto. Es que no se ejecutan los presupuestos, por lo que está pidiendo fondos cuando ni siquiera ejecuta los suyos propios. Esos fondos deben ir a empleo, pero la cuestión es a dónde van a ir con la señora Díaz, porque está demostrando numerosos incumplimientos a la hora de gestionar los fondos propios, como se ha visto que no destina los 30 millones de euros a dependencia que todos los meses le transfiere el gobierno de España para esta materia.
Las quejas por cuestiones como la dependencia, la sanidad o la educación están al orden del día. La Junta culpa a los recortes del Gobierno, pero ha terminado realizando los suyos, y al final los principales perjudicados son los ayuntamientos por la merma de sus servicios. ¿Qué alternativa ofrecen ustedes?
—Nos hemos comprometido a llevar una iniciativa al Parlamento, porque lo que es inconcebible es que el Gobierno central no falle ni un mes transfiriéndole a Andalucía los 30 millones de euros para dependencia y que Andalucía no ponga la parte que le corresponde y la tiene que poner. Lo soportan los ayuntamientos y las diputaciones, cuando eso es competencia de la Junta de Andalucía y si no es capaz de ejercer sus competencias, devuélvalas. Lo que no puede ser es que ayuntamientos y diputaciones estén asumiendo competencias impropias, que son de la Junta, que no paga, por incapacidad, y con la zancadilla puesta siempre.
¿Tuvo claro desde un principio que su prioridad era la Alcaldía de Valverde antes que seguir en el Parlamento Andaluz? Y ¿le parece razonable que no se puedan compatibilizar ambos cargos?
—Lo tuve claro desde el principio. No me parece razonable por el sentido en el que se ha hecho. Cuando se dice que un cargo público no puede ocupar dos asientos, una ley de esas entraría en el caso de que no pudiera un alcalde pero tampoco un presidente de dipuación, o un director de una empresa pública de la Junta, o miembros de la Junta con cargos en otras empresas públicas. No es una ley hecha para un cargo, un asiento, no, es una ley para expulsar a los alcaldes del PP del Parlamento, porque le incomoda que se lleve la realidad de los pueblos de Andalucía al Parlamento.
El Mundo la ha seleccionado entre las 28 políticas españolas más influyentes del momento, el PP considera clave su victoria en 2015, y también hay quien apunta que su ascenso dentro de los cargos orgánicos del partido está garantizado, ¿cómo afronta su carrera política a tenor de tales expectativas?
—Fue una grata sorpresa verme en esa lista, pero dicho eso yo siempre miro al futuro pero pisando con mucha seguridad en el presente, con lo cual tengo ahora dos objetivos en la cabeza y no miro más allá hasta que llegue el momento. Y esos objetivos son muy claros, la Alcaldía de Valverde y que Juanma Moreno gobierne en Andalucía. Por qué, porque en Valverde me duele y después de 32 años de gobierno socialista estamos levantando la ciudad de las ruinas en la que dejaron, y Andalucía porque me duele mi tierra, pero no tiene la cabeza que sepa gestionar tan excelentes recursos, y es una pena que una tierra como ésta esté en manos de quien está.
¿Cree que los políticos le están fallando a la gente?
—Yo creo que la gente se siente descontenta con los políticos y entiendo ese desapego ciudadano hacia la política y hacia los políticos, porque estamos viendo hechos muy lamentables. Pero también debo hacer una defensa de los políticos en general, al margen de que surjan temas que provocan heridas y cansancio en los ciudadanos, porque los políticos que trabajamos de forma honesta también estamos cansados y dañados y heridos por esos hechos. Hay mucha gente que se dedica a la política sin vivir de la política, y que lo único que quiere es mejorar su tierra, y la política no es sólo lo que sale últimamente, sino que es algo que ha ocurrido y que nos exige a todos los demás una obligación, la de recuperar la confianza de los ciudadanos, y sólo hay una forma de hacerlo, demostrando con hechos que hay personas nobles y honestas en política que lo que quieren es el bien de los ciudadanos y que tiene vocación de servicio público.
¿En qué medida espera sacar provecho de los itinerarios que va a realizar por las distintas provincias de Andalucía?
—Primero me encanta estar con la gente, estoy aprendiendo mucho, porque cada provincia tiene sus señas de identidad y las estoy conociendo en profundidad, así como a sus principales sectores productivos, escuchando y proponiendo soluciones.