Seis meses consumidos ya de 2017 y El Puerto aún no cuenta con un Presupuesto que avale las partidas presupuestarias municipales de la ciudad. Un Presupuesto que, a pesar de haberse consensuado y acercado a entidades y colectivos, sigue en su proceso de hallar un consenso global para su posterior presentación a Pleno y aprobación.
Un camino arduo que no ha resultado nada fácil, donde las cuentas no terminan de cuadrarse ante unas asignaciones que deberán ser respaldadas y aceptadas por la oposición. Las negociaciones continúan.
Y todo ello supeditadas al Ministerio de Economía y Hacienda que será el que tenga la última palabra. Mientras esa llega, el equipo de Gobierno lleva tiempo acercando su discurso con la oposición en pos de aplacar ánimos y buscar el bien común con la aprobación de un Presupuesto que no tiene aún fecha para su debate final.
Y en ello se encuentra Antonio Fernández, primer teniente de alcalde y responsable de Economía, de ser el encargado de realizar una ronda de contacto con los diferentes grupos políticos en la intención de hallar un acuerdo en su ofrecimiento de mantener una comunicación directa con todos ellos.
Si bien Ciudadanos ya ha dejado entrever que no será un problema en ofrecer sus votos, la clave para conseguir la viabilidad presupuestaria contará con sus dos votos, al igual, según parece, el más que probable voto afirmativo del concejal no adscrito Carlos Coronado.
Los votos del equipo de Gobierno, nueve, más estos tres otorgarían casi la mitad del Pleno. Los otros dos partidos con mayor número de concejales, Partido Popular y Levantemos El Puerto suman entre los dos trece ediles. Y es aquí donde está la clave de decantarse a un bando u otro en su aprobación o no.
La oposición férrea con la que de un tiempo a esta parte está encontrando con el que fuera su socio, Levantemos El Puerto, se antoja convertirse en la llave crucial para que, sin dar su voto favorable a que el Presupuesto salga adelante, lo cierto es que su abstención en positivo determinará que el equipo de Gobierno encuentre a un aliado más que decisivo para salir airoso de la encrucijada.
Aunque la disconformidad ha sido y está siendo tenaz por parte de estos, todo hace indicar que la inhibición será la que determine sus cuatro votos. Con los votos favorables de Ciudadanos (2), el no adscrito(1) y la abstención de Levantemos (4), más los nueve votos favorables del equipo de Gobierno del PSOE e Izquierda Unida, los nueve del Partido Popular no resultarían ya determinantes para decantar la balanza y así hallar una mayoría, exigua, pero determinante para inclinarla.
Con 16 votos (favorables y abstenciones), para el caso que el PP decida no apoyarlos, el Presupuesto municipal tendría el apoyo suficiente como para salir airoso de la encrucijada donde está sumido.
Es por ello que alcanzar un acuerdo con los que hasta la fecha está siendo el partido más fiscalizador y opositor y que salvando las diferencias en este asunto, todo hace presagiar que no pondrán obstáculos para que el Presupuesto al fin sea una realidad. O no, el verano se presume intenso en negociaciones y acercamientos.
