La plaga de ratas que desde hace meses sufre la barriada de Las Flores, donde viven unos 300 vecinos, ha llegado a tal extremo que en los últimos días los roedores son vistos “a cualquier hora del día” e incluso en una urbanización cercana a esta zona, un grupo de personas que se daba un chapuzón en su piscina hace unos días se encontraron con una rata “bebiendo agua” que tuvieron que desalojar “tirando de palos”. Para la presidenta de la asociación de vecinos Punta Norte, Chari López, lo ocurrido evidencia que la situación es cuanto menos insostenible y que este problema de insalubridad pública “se está expandiendo” a niveles ya insospechados mientras denuncian la falta de medidas por parte del Ayuntamiento de Jerez. Según relata, el foco de este conflicto de limpieza y malos olores y que se traduce en la presencia “masiva” de ratas es un canal sin utilizar para el que en 2014 se hizo un proyecto de soterramiento con idea de presupuestarlo en 2015 del que no han vuelto a tener noticias.
“En el último Pleno, cuando se preguntó por el tema, el delegado de Medio Ambiente dijo que ese problema se iba a solucionar con la desratización, y esa no es la solución sino el soterramiento del canal que tenemos”, critica López, que ve paradójico que pretendan instalar en la barriada un parque biosaludable sin meter mano a este problema que desde hace años les trae por la calle de la amargura. Tampoco entienden como el informe de Sanidad con el que cuentan, tras recurrir a la inspección sanitaria, donde se alerta de que “en un canal inutilizado con aguas fecales produce ratas de forma masiva”, no ha surtido efecto ante la Administración local.
Sin respuesta municipal
Sus esperanzas ahora están puestas en los fondos europeos Edusi, ya que creen que el soterramiento de este canal, que lleva tantos años abandonado, puede encajar en las partidas reservadas para zonas degradadas urbanas, y así se lo han planteado al Ayuntamiento, sin haber recibido respuesta alguna hasta el momento. “Estamos indignados. Nos asombra que no se cubra esto con estos fondos y que el Gobierno anuncie una pista de skate y parques biosaludables. Ha de tener prioridades, y la calidad de vida de los vecinos es lo primero y más cuando aquí llevamos desde 2009 con las obras de urbanización paralizadas pese a haber pagado 200 millones de pesetas”, apostilla la representante vecinal de Punta Norte.