Los trabajos han comenzado en las barriadas más bajas de la ciudad, concretamente en calles de Las Albinas, El Pilar y El Carmen, lugares donde existe mayor riesgo de problemas de evacuación de aguas en el caso de que se produzcan precipitaciones durante el mes de agosto. No sólo se actuará en los casos de imbornales en cuyas bocas se hayan acumulado suciedad y precisen un correcto adecentamiento, sino también se inspeccionarán aquellos que aparentemente estén en óptimas condiciones para prever posibles atascos en sus canalizaciones.
El Departamento Técnico de Chiclana Natural ha elaborado un calendario preventivo de actuación por todos los barrios del casco urbano. La empresa dedicará cuatro operarios y dos vehículos adaptados con las herramientas necesarias para llevar adelante este plan de choque. Luego se repararán los imbornales en mal estado.