Un padre acusado de un delito continuado de abusos sexuales a su hija cuando tenía entre 10 y 12 años ha reconocido los hechos y aceptado una pena de dos años de prisión, tras alcanzar un acuerdo con la Fiscalía y la acusación particular que ejerce la madre, que pedían 6 y 10 años, respectivamente.
El juicio, previsto hoy en la Sección Cuarta de la Audiencia de Sevilla, se ha limitado al reconocimiento de los hechos por parte del acusado tras alcanzar las partes un acuerdo, ante lo que el tribunal ha dictado una sentencia de conformidad.
Los hechos fueron denunciados por la familia de la menor en enero de 2016, meses después de que los padres de la niña -que tiene dos hermanos y una hermana- se separasen.
La denuncia contra el padre señalaba que éste había practicado tocamientos a su hija desde los diez años y que estos continuaron incluso después de que los padres se separaran y el progenitor abandonara la vivienda familiar.
La sentencia condena al acusado a dos años de prisión, cuatro años de retirada de la patria potestad, cuatro de libertad vigilada y diez de alejamiento de la menor -que actualmente tiene 14 años-, además de a pagarle una indemnización de 12.000 euros de la que según su defensa ya ha abonado la mitad.
La defensa, una vez que el tribunal notifique la sentencia por escrito, solicitará la suspensión de la ejecución de la pena de prisión para el acusado, sin antecedentes penales y actualmente en libertad provisional.