La imponente fortaleza que mandara a construir el segundo Duque de Medina Sidonia y su esbelta Torre del Homenaje, fueron testigos mudos de la Oración de Cristo en el Getsemaní sanluqueño. Jesús, postrado de hinojos, pedía al Padre que apartara de él aquel trago, acompañado de un ángel confortador y mientras los tres apóstoles, Pedro, Santiago y Juan duermen bajo un olivo. Es este el pasaje que cada Domingo de Ramos nos anuncia la Hermandad con sede en la iglesia de San Diego. Hermandad que en los años cuarenta fundara el capuchino Fray Luis Antonio de Sevilla, gran artífice de la consecución de esa belleza de Cristo orante y del ángel, obra cumbre del imaginero Antonio Eslava Rubio.
La Ilustre y Fervorosa Hermandad y Cofradía de Nazarenos de Ntro. P. Jesús de la Oración en el Huerto y María Santísima de Gracia y Esperanza, inició su estación de penitencia a las 16:45 de una radiante tarde donde el sol y la alta temperatura marcaron las primeras horas de su recorrido. Bellísimas imágenes contemplamos en la salida de esta hermandad, pues no menos bello es el enclave donde tiene su sede. Iglesia de san Diego, antiguo Hospital, Castillo imponente y al fondo espadaña de Santo Domingo e, incluso, playa y coto de Doñana podemos ver desde el pasaje Virgen de Gracia y Esperanza.
A las órdenes de Ángel Cadena Ríos en el paso del Señor y de Félix de los Reyes Salas en la Virgen, las distintas cuadrillas de costaleros llevaron a Cristo y a María por las calles de Sanlúcar, ante un gran gentío que no quería perderse el mínimo detalle.
Acompañó el paso del Cristo la Banda de Cornetas y Tambores de la Vera Cruz de Utrera, como viene siendo habitual desde hace ya muchos años. En el paso de palio de Gracia y Esperanza iba la Asociación Filarmónica Banda de Música Julián Cerdán de Sanlúcar de Barrameda.
El exorno floral: Friso sobre canasto rematando el monte de piedras, con flores en tonos malvas. En el paso de la Señora una mezcla de flores blancas.
Viste la imagen del Cristo José Luis Franco Sánchez y Francisco Miranda Vargas; viste la Virgen de Gracia y Esperanza Jesús Campos.
Al margen de su salida procesional hay que destacar la subida por la Cava del Castillo cuando viene ya buscando su recogida.
En definitiva, si tuviéramos que concluir con una sola frase lo que ha sido este primer día de Semana Santa, tendríamos que repetir la misma que encabeza esta crónica: Apoteósico Domingo de Ramos.