La Junta de Andalucía, a través de los distritos sanitarios de atención primaria de Huelva, inicia esta semana la realización de test rápidos de detección del coronavirus a las profesionales que prestan el Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD) en los diferentes municipios de la provincia. En concreto, se trata de 1.843 auxiliares, mayoritariamente mujeres.
Esta actuación da continuidad a la campaña del mismo tipo que la administración sanitaria andaluza tiene en marcha dirigida a usuarios y personal de las residencias de mayores, a la que se han incorporado también otros centros de carácter sociosanitario, como son los de atención a personas con discapacidad, Faisem y las comunidades terapéuticas y los centros ambulatorios para población con adicciones.
Con vistas al desarrollo de esta segunda fase, los distritos sanitarios onubenses cuentan con una nueva partida de 6.000 test rápidos, que se suman a los otros 6.000 que ya habían recibido con anterioridad de la Consejería de Salud y Familias destinados a efectuar estas pruebas de diagnóstico en las residencias de mayores. Así, en total ya ascienden a 12.000 los test distribuidos hasta el momento en la provincia, de los cuales los distritos Huelva-Costa y Condado-Campiña han recibido 7.200 y el Área de Gestión Sanitaria Norte de Huelva 4.800.
El reparto de los test se planifica en función del número de plazas sociosanitarias que existen en las diferentes provincias andaluzas.
En el caso específico del SAD, la realización de los test se va a llevar a cabo previa cita y de manera programada en los propios centros de salud de referencia para las trabajadoras. Mientras que en las residencias de mayores y otros dispositivos sociosanitarios los profesionales de atención primaria se desplazan a las propias instalaciones para facilitar su accesibilidad a las personas que se encuentran internas.
En todos estos colectivos las indicaciones para la realización de los test son tanto para pacientes sintomáticos como para pacientes asintomáticos. Así, en pacientes sintomáticos se efectúa el test rápido (muestra de sangre) cuando haya clínica sugestiva de Covid-19. Si el resultado es positivo se establece el diagnóstico de Covid-19 sin necesidad de hacer otros estudios, y si el resultado es negativo se realiza una prueba PCR a partir de exudados orofaríngeos. Por su parte, en personas asintomáticas se realiza test rápido de anticuerpos SARS-CoV-2: en caso de resultar positivo se diagnostica como Covid-19 (infección reciente o pasada); en el caso de resultar negativo se valorará nueva actuación en función del riesgo de exposición.
En el apartado específico de las residencias de personas mayores estas pruebas se suman a las de tipo PCR que ya se venían facilitando tanto a residentes como a trabajadores de los centros.
La Consejería de Salud y Familias considera que el incremento de la capacidad de realización de pruebas de detección es una estrategia fundamental para potenciar el diagnóstico entre la población y frenar el avance de la pandemia en la comunidad autónoma. Tal y como establecen los protocolos del Ministerio y la administración sanitaria andaluza, dentro de esta campaña actualmente se está dando prioridad a colectivos ciudadanos de riesgo y a los profesionales del ámbito sanitario y social, entre otros efectivos considerados esenciales. La intención de la Junta es extender progresivamente el uso de estos test al resto de la población.