Los cortes de suministro de agua en el casco antiguo de Arcos se han prolongado varios días, más de lo deseado, después de los contratiempos surgidos con el desarrollo de una obra ya prevista y planificada para mejorar el servicio. De hecho, los trabajos fueron comunicados a los vecinos con el consiguiente horario respecto a los cortes de suministro.
Se trata de tareas de conexión en la red dentro de los trabajos que viene efectuando la Diputación de Cádiz en la calle Corredera a través del Profea. Al intentar reponer el servicio del suministro de agua a los hogares, surgió un nuevo problema: el agua no llegaba o, si lo hacía, era con falta de presión.
El Ayuntamiento, la empresa concesionaria del servicio (Aqualia) y la dirección de obras de Diputación aseguran haber trabajado para localizar la avería y ofrecer alternativas para el suministro de agua lo más urgentemente posible.
Para ello, además de trabajar en la calle Corredera, se ha hecho en Pozo Hondón por si se pudiera suministrar el agua desde ese punto. Finalmente, no sin dificultades, el viernes se localizó el tapón que impedía el paso del agua: una formación de cal de grandes dimensiones que obstaculizaba el flujo y su conducción hasta el casco antiguo. Una vez eliminado el tapón, se realizaron las conexiones pertinentes con intensas tareas por parte de operarios y técnicos de Aqualia y Diputación, que se llevaron a cabo tanto en la confluencia de Corredera con Julio Mariscal como en la entrada de la calle Alhóndiga para reforzar la presión.
“Siendo conscientes de la desagradable situación vivida por vecinos del casco antiguo, máxime en pleno verano”, señala el Ayuntamiento, el viernes se procedió a la distribución de agua mediante vehículos cisternas.
El equipo de Gobierno y el propio alcalde, Isidoro Gambín, estuvieron pendientes en todo momento de las obras y en contacto con la asociación vecinal.
El ejecutivo ha pedido disculpas a todos los afectados y lamenta públicamente “los perjuicios ocasionados por la falta de agua”, pero al mismo tiempo solicita la comprensión de los vecinos, ya que “desde el minuto uno se ha trabajado para devolver el servicio lo antes posible a la ciudadanía de este sector”.
Fuentes municipales aseguran que “nadie se ha quedado de brazos cruzados”, en alusión a los operarios de Aqualia, Diputación y Ayuntamiento, así como que en ningún momento ha habido falta de planificación con las obras Profea, salvo su lógica paralización durante los meses de confinamiento. En este sentido, el Ayuntamiento insiste en que el origen de la avería es “una red de suministro de agua anticuada y obsoleta que ahora, precisamente, se está sustituyendo gracias a la obra Profea”, reforzada con otras actuaciones que se vienen ejecutando durante los últimos años en el casco antiguo.
De hecho, en 2019 se realizaron también obras Profea en Cristóbal Colón y adyacentes, calle de las Monjas, Valdespino, Juan del Valle, etc. También en 2020 en Cristóbal Colón, plaza de la Vera Cruz y Corredera. Ambas fases han contemplado mejoras en iluminación y pavimento. Además, este año se han realizado obras en Callejas y adyacentes de la mano de Aqualia.
El equipo de Gobierno se reafirma en su compromiso por el casco antiguo, para señalar que “se realizan obras que no se han llevado a cabo durante décadas, y el estado de las infraestructuras, incluidas las del agua, es pésimo en muchos puntos. Seguiremos trabajando por dotar de mejores servicios a nuestro barrio más y emblemático y conocido”.