Al Xerez DFC le faltó un gol y un mejor arbitraje

C. de Lucena    1
Xerez DFC    1
Ciudad de Lucena: Javi Cuenca; Mario Hernández, Pablo Gallardo, Germán, Zurdo; Toni Pérez, Luismi (Diego, minuto 90), Mario (Xomin, minuto 90) ; Erik (Borja, minuto 69), Joselinho (Adri Pavón, minuto 63), y Maero (Javi Henares, minuto 68)
Xerez  DFC: Camacho; Marcelo, Toboso (Sergio Narváez, minuto 83) Edet, Marcelo; Adri, Alex Colorado, Goma (Javi Casares, minuto 57); Zafra (Jacobo, minuto 70), Antonio Sánchez (Mika, minuto 83) Bello
Goles:
0-1 m. 47: Marcelo. Golazo tras un rechace defensivo
1-1 m. 49: Pablo Gallardo. Tres rechaces y el central remató a gol
 
Árbitro:Alcaraz Yáñez. No vio un penalti sobre Alex Colorado en el minuto 5 y anuló un par de goles por fuera de juego a los azulinos, uno de ellos, el segundo de Antonio Sánchez, muy dudoso. Descontó al final diez minutos. Amonestó a los lucentinos Mario Hernández, Toni Pérez y a los azulinos Antonio Sánchez, Adri en dos ocasiones por lo que fue expulsado en el 99, Javi Casares, Jacobo y a Toboso y Alain en el banco.
Incidencias:  Partido de play off de ascenso a Segunda División B disputado a puerta cerrada en el Antonio Lorenzo de Marbella.
 | No pudo ser. El factor del tercer puesto y el valor del empate favorable para el Ciudad de Lucena decantó un partido tremendamente disputado, con dos equipos entregados que parecía increíble que llevasen cinco meses sin jugar y con un arbitraje que pudo ser determinante en dos acciones puntuales que lesionaron los intereses de un Xerez DFC que si bien en el primer tiempo sufrió el buen hacer del equipo de los hermanos Carrasco, en la segunda fue dueño y señor absoluto de la situación, con una ocasión magnífica para Javi Casares que no resolvió un uno contra uno contra Javi Cuenca y con balones que no lograron traspasar la meta de puro milagro. Los de Uribe se dejaron el alma y algo más sobre el terreno de juego, que acusó el partido disputado el sábado, pero no pudieron ganar que eran lo que necesitaban.
Mika, Sergio Narváez, Jacobo, Javi Casares y Bello estuvieron juntos en el terreno de juego. Incluso Edet se colocó de delantero centro, a lo Alexanco, pero fue imposible de marcar ese segundo gol y si se marcó fue anulado.
No se le puede reprochar absolutamente nada al equipo que este domingo vestía de verde. Lo dio todo, absolutamente todo, sobre el terreno de juego pero, como dijo su entrenador en la previa del choque, un detalle podía determinar el encuentro y así fue. El Xerez DFC no estuvo despierto a la hora de cerrar su puerta tras el gol, golazo, marcado por Marcelo. Se le ponía el encuentro de cara. Marcaba nada más comenzar la segunda parte, se adelantaba en un encuentro en el que, visto lo visto, parecía que el que marcase primero podía ganar, pero en la siguiente jugada la defensa no estuvo certera a la hora de achicar el balón y Pablo Gallardo, la veteranía es un grado, terminó alojando el esférico lejos del alcance de Camacho.
A partir de ahí fue otro partido. Un Xerez DFC ansioso, desbocado y un Ciudad de Lucena que puso sus armas al servicio del empate. Intentó que se jugase el menor tiempo posible,  hubo jugadores que sabían mandar y templar y además, fiel a lo que ha sido su trayectoria liguera, se fajó en defensa con esos veteranos como Zurdo, extraordinario a sus 39 años, Germán o Pablo Gallardo, mientras que el isleño Mario Hernández cubrió con notable la baja de Sergio Valls.
Al final el Xerez DFC se despertó del sueño y el Ciudad de Lucena, con fortuna, se mete en la final.