Apacible y primaveral noche de Martes Santo en Alcalá que ha servido de telón de fondo a la procesión de los dos pasos de la Cofradía de Penitencia de Nuestro Padre Jesús en la Oración en el Huerto de los Olivos y María Santísima de la Esperanza. El itinerario, ya consolidado en los últimos años, ha incluido, tras la salida de Consolación en torno a las 8 de la tarde, la Carrera de las Mercedes, y calle Alonso Alcalá, Plaza del Ayuntamiento, General Lastres, Angustias, Veracruz, Carrera de las Mercedes, Santo Domingo, Horno (Antón Alcalá), Gala (Guardia Castellano), Tejuela y regreso a su templo.
La cofradía ha estrenado este año cuatro ciriales y pértiga en madera tallada realizados en los talleres de los hermanos Cubero de Priego de Córdoba, cinco dalmáticas para el cuerpo de acólitos y cuatro nuevos trajes para el cuerpo de niños monaguillos, nueva saya para María
Santísima de la Esperanza, con aplicación en oro fino sobre tisú de plata, realizada y diseñada por el granadino Álvaro Abril Vela, así como un nuevo banderín-Insignia para el nuevo grupo joven de la cofradía, realizado en aplicación de oro sobre terciopelo verde.
La Cofradía de la Oración en el Huerto es relativamente joven. Concretamente, en 1986 realizó su primera salida procesional, de una forma muy precaria, pero apuntando que tenía la intención de consolidar el Martes Santo como un momento importante de la Semana Mayor de nuestra ciudad. A pesar de esa juventud, su origen se remonta al siglo XVI, pasando por momentos de brillantez y declive, con varias disoluciones, la última de ellas en los años cincuenta del siglo XX.
El misterio, compuesto por Jesús Orando en el Huerto y un ángel, fue realizado por Jacinto Higueras en 1950 y la Virgen de la Esperanza es obra del prieguense Manuel Cubero en el año 1986 y restaurada posteriormente por Enrique Ruiz. Los pasos son portados a trabajadera doble (misterio) y costal (palio), siendo esta la cofradía que innovó en la ciudad esta forma de portar sus imágenes, ya recogida en sus proyectos de 1950 y que dan una brillantez especial a su desfile procesional.