Muchas veces se ha dicho que los jóvenes son rebeldes por su misma condición que les da la edad. Se rebelan contra las condiciones disciplinarias (en su gran mayoría necesarias) que se impone en la familia, la escuela, el instituto, la universidad, en el trabajo y en la sociedad en general para mantener unos grados de convivencia aceptables por todos. La libertad de uno termina donde comienza la del otro u otros.

Pero aún así, los jóvenes en sus sentimientos inconformistas contra un mundo, una sociedad que no les gusta o gustaba, siempre, a su manera, se han rebelado con mayor o menor intensidad a lo largo de la historia, y también en función del grado de represión o de injusticia que se daba o da en la sociedad que les rodeaba o les rodea.

Uno que conoció la Revolución de los Claveles en Portugal, el mayo francés del 68, o la primavera de Praga, el golpe de estado contra Salvador Allende por el dictador criminal Augusto Pinochet, o los movimientos juveniles y obreros contra la dictadura de Franco, etc., tiene la sensación de que los jóvenes actuales no tienen motivos para revelarse. Han recibido por herencia política y social unos niveles democráticos aceptables aunque insuficientes; unos niveles de tolerancia familiar (a veces excesiva); un derecho universal a una formación buena; una sexualidad mucho más libre de lo que muchos conocimos a nuestra edad; un cierto grado de consumo aceptable ¿Pero de verdad creéis que esto es suficiente?

Vamos a ver:

¿Cómo está vuestro trabajo, si es que trabajáis? ¿Se os paga según las leyes? ¿Tenéis contratos precarios? ¿Cuántas horas de más trabajáis sin cobrar? ¿Sois mileuristas o ganáis aún menos? ¿Estáis estables en vuestro trabajo, o estáis en precario y al capricho de vuestros empresarios? ¿Sabéis que la crisis mundial se está cebando más con vosotros y las mujeres?

Observáis el deterioro de la tierra que está produciendo la avaricia de unos pocos, y que además nos comen en ‘coco’ para que imitemos sus desmanes y formemos parte de la cadena destructiva. ¿Conocéis el problema grave del cambio climático, que os va a afectar directamente a vosotros conforme vaya avanzando vuestra edad?

¿Y de la vivienda? ¿Y las pensiones? ¿Con vuestro salario? Esto tiene un claro culpable; un sistema capitalista, neoliberal, conservador, que no tiene más alternativa que lo jóvenes os rebeléis por un mundo distinto.

Y podríamos seguir haciendo muchas más preguntas. Es verdad que os habéis separado de la política o de la vida sindical porque en muchas ocasiones los dirigentes políticos, sindicales, sociales, religiosos... no están dando ejemplo como para animaros a entrar de lleno en participar.

Pero desde hace 10 años una nueva esperanza se está abriendo a nivel mundial: el Foro Social Mundial, que comenzó en Porto Alegre y que poco a poco se va extendiendo por todo el mundo.

Aquí en El Puerto se creó El Foro Social Portuense donde muchas organizaciones sociales, sindicales y políticas (en la actualidad 30), iniciamos nuestra andadura allá por el año 2000, con el objetivo de, renunciando cada uno a un protagonismo egoísta e individual, luchar por los problemas sociales más graves de nuestro Puerto. Bajo el principio del Foro Social Mundial de ‘Piensa globalmente, pero actúa localmente’ estamos llevando ese objetivo a nuestra localidad.

Por ello os animamos a que los próximos días 23 y 24 de abril participéis en el Encuentro del Foro Social Portuense, en el instituto José Luis Tejada (entrar en www.forosocialportuense.es, donde entre todos debatiremos qué podemos hacer para cambiar nuestra ciudad bajo el principio de ‘Otro ,undo y otra ciudad es posible’. En ella estarán prestigiosas personas que están marcando, con la colaboración de todos, un nuevo camino de lucha, de rebeldía social, para cambiar esta injusta sociedad entre todos, en contra de los poderosos de la tierra.

¡ Rebélate!! El Foro Social Portuense puede ser tu herramienta.