Unas 120 personas que diariamente acuden al comedor de la entidad buscando un plato caliente y unas 400 familias que reciben alimentos y ayuda económica para pagar lo más urgente.
Es una situación que lejos de mejorar, está empeorando, como señala a Información Bahíala responsable de la entidad, Mila Aragón. “Hemos pasado de 80 personas que atendíamos en el comedor el año pasado a cerca de 120 y de 160 familias hemos pasado a atender a 400 familias”.
“Muchas de las nuevas familias a las que atendemos han llamado a nuestra puerta porque el subsidio de desempleo que cobran se les ha terminado y ya no cuentan con más ingresos. Otras vienen a nosotros porque las empresas es las que trabajaban sus miembros han cerrado o les han echado y se encuentran de repente con un mínimo nivel de ingresos”, apunta Aragón.
La responsable de Valvanuz dijo que la entidad recibe una “pequeña” subvención de la Junta para atender el comedor y a las familias, pero no es suficiente. También recibimos donaciones de socios, de particulares, y de empresas, pero éstas están cayendo. Hay muchos particulares o socios que nos llaman para decirnos que suspenden su colaboración por la crisis”.