Así, las mujeres reunidas en torno a las mesas de debate han reclamado “más protagonismo” de la mujer europea. En concreto, el encuentro, cuyo tema central ha sido Mujer Europea y Liderazgo, se ha realizado en los 27 países de la UE. Las dos mesas redondas han girado en torno al debate sobre las cuotas femeninas y si son necesarias también en el mundo de la empresa y sobre casos particulares de empresarias a la hora de emprender.
Algunos de los datos destacados durante el encuentro han sido que dos tercios de los 63 millones de parados de 25 a 65 años que hay en la UE son mujeres. Igualmente, se ha puesto de manifiesto que una ciudadana de la UE debe trabajar, por término medio, 418 días naturales para ganar lo mismo que un hombre en un año natural. Además, sólo un 3 por ciento de las grandes empresas europeas están dirigidas por una mujer.
Por otro lado, se ha resaltado que un 17 por ciento de las mujeres de la UE vive en condiciones de pobreza. Asimismo, durante la edad adulta, entre el 20 y el 25 por ciento de las mujeres de la UE sufre violencia física, y más del 10 por ciento son víctimas de violencia sexual.
Igualmente, se ha destacado que tras las elecciones europeas de 2009, el 35 por ciento de los eurodiputados son mujeres y que la cuota de mujeres en el Parlamento Europeo es de diez puntos porcentuales más alto que en los parlamentos nacionales de la UE. Además, sólo ha habido dos presidentas del Parlamento Europeo que hayan sido mujeres.
Finalmente, se ha señalado que seis de los catorce vicepresidentes actuales son mujeres, frente a las cuatro mujeres de la anterior legislatura. Del mismo modo, la Comisión Europea está formada por nueve mujeres (33%) y 18 hombres (67%), el mejor equilibrio alcanzado hasta ahora. Por último, en el Consejo de la UE, un 84 por ciento de las personas que ostentan puestos directivos son hombres, frente al 16 por ciento que son mujeres.
Sin embargo, la diferencia salarial entre hombres y mujeres directivos se ha reducido un 27,2% por la crisis, según el informe Evolución de la igualdad retributiva durante la crisis realizado por la Escuela Superior de Administración y Dirección de Empresas (ESADE) y la empresa consultora ICSA Grupo.
Según el informe, cerrado el 31 de enero de 2011, la brecha salarial ha pasado de un 16,5% en 2010 a un 12% en el presente año, lo que, a juicio del presidente de ICSA, Ernest Poveda, no se debe a un aumento de la retribución de las mujeres con estos cargos, sino a que la retribución masculina ha caído respecto a años anteriores.
En cuanto a la presencia de las mujeres en cargos directivos, la cuota ha descendido un 10% respecto a 2010, hasta un 11,7%, aunque si se compara con 2008, el retroceso es “importante”, ya que supone una caída del 38,42%.
Esta cifra, según Poveda, supone una “contradicción”, ya que son las mujeres directivas quienes están más formadas, pues en el 90,5% de los casos tienen estudios universitarios, mientras que la cifra baja hasta el 85,3% en el caso de los hombres.
En este sentido, Poveda considera que es un “tremendo” error “infravalorar” a las mujeres, ya que significa “desperdiciar” el talento de “más de la mitad de la población”.
Asimismo, el profesor de Recursos Humanos de ESADE, José María Gasalla, ha destacado que “algo se está haciendo mal”, porque estas cifras, a su juicio, indican que el verdadero problema es “la cultura de las organizaciones”.
De este modo, Gasalla afirma que mientras se valore más la presencia de las personas que su cualificación, seguirá existiendo discriminación, ya que, a su juicio, las compañías ven a los hombres “más fuertes” y en momentos como los actuales consideran que los hombres pueden hacer mejor el trabajo que las mujeres, por ejemplo en el departamento de Recursos Humanos donde actualmente muchas empresas se enfrentan a Expedientes de Regulación de Empleo u otros trámites “duros”.
Por categorías profesionales, el estudio, que ha analizado la evolución entre directores generales, comerciales, de administración y finanzas, de producción y de recursos humanos, subraya que la mayor diferencia salarial se da entre los directivos de administraciones y finanzas, mientras que la menor se encuentra entre los directivos generales.