Unos 200 vecinos de la barriada Pueblos Blancos, de la Verbena y otras zonas céntricas de la ciudad tomaron ayer las calles para exigir, en definitiva, que se culmine lo antes posible las actuaciones para la consolidación de la ladera oeste de Arcos y así impedir que, en muchos casos, sus viviendas se pierdan.
Los afectados, ya constituidos en plataforma, aprovecharon para lanzar consignas hacia otros vecinos que no se sumaron a la manifestación, así como hacia otras barriadas y calles que están afectadas por los corrimientos de tierra, con lo que pretendieron hacer ver y comprender que el problema no es sólo de unas cuantas zonas de la ciudad, sino de todo Arcos.
La manifestación partió sobre las 18.30 horas de Pueblos Blancos para recorrer la travesía urbana, avenida Muñoz Vázquez, Duque de Arcos, Miguel Mancheño, Paseo de Andalucía, etc. y contó con la escolta de la Policía Local, que estuvo obligada a cortar el tráfico provisionalmente en algunos tramos del recorrido.
Desde la asociación vecinal Pueblos Blancos, su presidente, Juan Carlos Morón explicaba que el deseo de los vecinos es que “se mande cuanto antes el dinero que necesita Arcos para las obras”, las cuales teóricamente están en marcha en una primera fase con la ejecución de la empresa pública Tragsa. Morón señaló que por ahora el Ayuntamiento está cumpliendo la palabra de tener informados puntualmente a los vecinos, de ahí que supieran ya del viaje realizado a Madrid el martes por la alcaldesa para buscar fondos en los ministerios.
En el caso de la barriada Pueblos Blancos, el presidente se congratuló del paso que ha dado la empresa constructora de las viviendas, Dolmen Consulting, de aceptar un estudio oficial sobre la estabilidad del terreno y así tomar alguna medida al respecto; un estudio que podría ser realizado por el ingeniero Emilio Yanes como ya ha ocurrido en la Verbena.
“Lo que queremos es que las noticias no se queden en el periódico, en los despachos o en el aire, sino que se cumplan”, explicó Morón. Asimismo, aseveró que los vecinos quieren “que Dolmen dé la cara”, ya que estas viviendas podrían estar supuestamente deterioradas también por una incorrecta cimentación, por lo que propusieron que los vecinos que tienen daños en sus viviendas pasen a ocupar otras de la misma promoción que se encuentran aún en buen estado y que no han sido ni vendidas ni alquiladas.
No obstante, Morón, sin querer “entrar directamente en el tema”, dejó caer “la politización” que está sufren las reivindicaciones vecinales. De hecho, aunque se puedan dar diferentes lecturas, la manifestación contó con una amplia representación de todos los grupos opositores al Gobierno socialista.
En semejantes términos, la vocal de la plataforma, Mercedes Gutiérrez, adelantó que se han enviado escritos a varios ministerios extrapolando la situación que sufre Arcos. En particular aludió a Fomento para realizar algún tipo de estudio geotécnico que facilitara una posible intervención. En el terreno personal, señaló no confiar demasiado en las gestiones que se realizan a nivel político “porque todo va muy lento”. En este sentido, recordó que los vecinos del parque de la Verbena llevan dos años demandando una actuación que ha dado comienzo hace apenas un mes.
Mientras tanto, la pretensión de la plataforma por la estabilización del terreno es celebrar una manifestación mensual “hasta tanto no se resuelvan los problemas”. Como medida más drástica, están incluso dispuestos a viajar a Madrid para protestar en la cara del Gobierno de la nación.
Como anécdota, al paso de la manifestación por la travesía urbana se pudo ver a un trailer transportar una de las máquinas pesadas que estos días ha operado en la Verbena, mientras los vecinos gritaron “No os la llevéis”.
Declaraciones de la alcaldesa
—¿Cómo le ha ido su reunión en Madrid con el Ministerio de Ciencia e Innovación?
—La impresión que tengo ahora es mejor que la que experimenté en un principio, pues creo que había algo de confusión en el Ministerio de Ciencia e Innovación respecto al problema que sufre Arcos. Quiero explicar que me ofrecieron hacer un estudio por parte del Instituto Geológico Minero sobre las zonas que se deslizan, pero lo quiere esta alcaldesa y el Ayuntamiento no es un estudio, porque ya lo tenemos, sino el dinero para ejecutar la obra.
—Se refiere al estudio del ingeniero Emilio Yanes...
—Efectivamente. Entonces, si tenemos un estudio serio y riguroso, para qué queremos más estudios. Lo que deseo es que tengan en cuenta ese informe. Además, hay un compromiso de distintos secretarios de Estado de trabajar sobre este asunto y buscar la financiación que se precisa. Hay que ir por partes, y lo primero es terminar bien la obra de la Verbena y después comenzar a trabajar en otras zonas afectadas. Mi intención es que se contrate a Emilio Yanes para dirigir futuras actuaciones. Creo que eso ha quedado claro en Madrid.
—¿Qué pasos dará los próximos días?
—Sé que Gaspar Zarrías está muy preocupado con el problema de Arcos. Han quedado en llamarme esta semana una vez se reúnan de nuevo los secretarios de Estado. Además, he forzado de algún modo una reunión de los ministerios con la Junta de Andalucía para que también la autonomía aporte algo al grave problema de la ciudad.Ahora estoy un poco más tranquila, pero, evidentemente, hasta que esta terrible pesadilla no termine no descansaré.