Corea del Sur planea lanzar su tercer satélite de reconocimiento militar en diciembre, según confirmó este miércoles el Gobierno, como parte de los esfuerzos del país por reforzar su vigilancia sobre Corea del Norte.
La Administración del Programa de Adquisiciones de Defensa (DAPA) surcoreana explicó que enviará el satélite en un cohete de la compañía estadounidense fundada por el magnate Elon Musk SpaceX, que despegará durante la segunda quincena del último mes de 2024.
El lanzamiento supondrá el tercero dentro del plan de Seúl de tener para 2025 una plataforma con cinco satélites espías, con vistas a vigilar mejor a la vecina Corea del Norte.
En abril y diciembre del año pasado, Corea del Sur puso en órbita otros dos satélites, uno equipado con un sensor electroóptico e infrarrojo para capturar imágenes detalladas de la superficie de la Tierra, y otro con sensores de radar de apertura sintética (SAR) capaces de recopilar datos independientemente de las condiciones climáticas.
Una vez concluya el lanzamiento de los cinco satélites espía y se determine que son aptos para operar, se espera que el ejército sureño pueda monitorear un objetivo determinado en Corea del Norte cada dos horas.
Hasta ahora, la vigilancia militar desde el espacio sobre el hermético régimen de Kim Jong-un por parte de Corea del Sur dependía en gran medida de las imágenes satelitales proporcionadas por Estados Unidos.
Más allá de los cinco lanzamientos previstos, Seúl pretende reforzarse aún más en este sentido lanzando pequeños satélites de reconocimiento: unos que pesarán menos de 500 kilogramos y otros menos de 100.
Cohetes espaciales de combustible sólido de fabricación nacional pondrán en órbita los mencionados satélites, cuyos lanzamientos están programados en dos intervalos: entre 2026 y 2028 los de peso inferior a 500 kilogramos, y entre 2028 y 2030 los de menos de 100.
