Historia

Esta Hermandad nace de la fusión entre las Hermandades del Nazareno y de la Buena Muerte cuando la segunda corría riesgo de desaparecer. Por este motivo aún se mantienen las dos salidas penitenciales en el Jueves y Viernes Santo.

La primera Hermandad que se fundó en Coripe fue aproximadamente en el año 1936 y se llamaba “Hermandad del Gran Poder y María Santísima de los Dolores”. La segunda se fundó en torno al año 1950 y se llamaba “Hermandad del Cristo de la Buena Muerte y María Santísima de los Dolores”.

En la noche del Jueves Santo (22:30h) realizan estación de penitencia con las imágenes de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de los Dolores.

En el Viernes Santo, y a la misma hora que la jornada anterior, lo hacen con las imágenes del Santísimo Cristo de la Buena Muerte y nuevamente María Santísima de los Dolores.

En las dos salidas, los nazarenos visten túnica blanca de tela con antifaz y capa de color negro y cíngulo y botonadura morada. 

La sede parroquial de la misma es la Iglesia de San Pedro Apóstol de Coripe, donde se veneran nuestras imágenes bajo la  advocación que son el Santísimo Cristo de la Buena Muerte, Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de los Dolores.

El escudo de la hermandad es una corona de espinas en cuyo centro se incluyen las siglas JHS coronado por una una cruz y rematando a los pies los clavos enlazado.

Imágenes

La imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno es obra de Manuel Martín Nieto, realizada en 1996.

María Santísima de los Dolores es talla de Francisco Reyes Villadiego en 1988.

El Santísimo Cristo de la Buena Muerte es talla anónima, restaurado por Manuel Martín Nieto en 1997.

El Judas

El Domingo de Resurrección de Coripe es uno de los días más importantes para la localidad con la tradición del "Judas".

Para la ocasión, se recrea el Huerto de los Olivos por el que pasa la procesión del Cristo Resucitado (organizada por la Parroquia de San Pedro) y, una vez finalizada esta, se celebra "la quema de Judas".

En la plaza principal del pueblo se hace el llamado Huerto de los Olivos presidido siempre por la imagen del Sagrado Corazón de Jesús. Tras la misa del Domingo de Resurrección, tiene lugar la procesión, en la cual se van lanzando tiros de salvas por los escopeteros coripeños. Una vez que pasa la procesión por el Huerto, se desmantela la plaza para comenzar con la "quema del Judas". La quema consiste en un muñeco hecho de tela y de paja que habitualmente representa al personaje más impopular del año o alguien que se ha caracterizo en el año por alguna fechoría o mal comportamiento. El Judas es traído a la plaza acompañado por los tradicionales cabezudos y los escopeteros. Tras ser colgado de una higuera, colocada junta a la Iglesia para la ocasión, es tiroteado por escopeteros del pueblo con munición de salva, hasta que este empieza a arder y es quemado en su totalidad.

Esta tradición ha sido declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional de Andalucía.