En principio estaba previsto que esas obras empezaran a ejecutarse a lo largo de la primavera, dando de este modo continuidad a los trabajos de remodelación de la plaza acometidos el pasado año.
El proyecto inicial contemplaba la peatonalización del tramo de la plaza comprendido entre las calles Levante y Diego Fernández Herrera, que pasaría a disponer de un pavimento similar al dispuesto en la zona ya remodelada de este céntrico enclave.
Esta actuación obligará a reordenar el tráfico, utilizándose el tramo de la plaza en el que suelen estacionar los autobuses como vía de doble sentido. De este modo quedaría garantizada la conexión entre las calles Diego Fernández Herrera y Corredera, manteniéndose además la ya existente entre Corredera y Porvenir. Además, estaba previsto que los residentes pudieran circular por el nuevo tramo peatonal.