La alcaldesa de Hernán Valle destina su primera asignación personal al arreglo de la parada de autobús

María Ortega (Izquierda Unida), alcaldesa de la pedanía accitana ha iniciado su mandato cumpliendo el compromiso adquirido con sus vecinos y vecinas de destinar la totalidad de la asignación económica que le corresponde como máxima autoridad del municipio en beneficio de sus conciudadanos.
De esta forma la alcaldesa ha destinado los 192 euros que ha cobrado del mes de septiembre a adecentar la parada del autobús. “La cantidad no es que sea muy elevada, pero, acompañada de la implicación y participación de los vecinos, y en especial de Leo Martínez, pintora conocida y muy reconocida en Guadix, ha sido fundamental para que el resultado haya sido espectacular”, declara María Ortega.
Con el sueldo de la alcaldesa se han podido comprar las pinturas y enseres necesarios para convertir una parada de autobús “vieja y oxidada” en toda una obra de arte con la colaboración desinteresada de Leo Martínez, que se ha puesto al servicio del pueblo, “pero también la implicación de la asociación de mujeres de Hernán Valle, que decidieron que además de embellecer la vieja parada, había que hacer una llamada de atención a una de las peores lacras de la sociedad como es la muerte y el terror machista hacia las mujeres y que tantas muertes está costando”, señala Ortega. Con estas premisas se acuerda que la nueva  parada contenga una frase y un lazo morado para que cada vez que los vecinos y vecinas de Hernán Valle accedan a la parada del autobús recuerden que siguen muriendo mujeres en manos de sus parejas.
María Ortega además quiere que, junto a la denuncia, también aparezca algo simbólico de vida y a la vez identificativo de Hernán Valle, por eso le pide a Leo la flor del almendro y la rama de olivo, ambos cultivos típicos de la vega de Hernán Valle.
Toda esta iniciativa ha conllevado una semana de trabajo, puesto que la realización de estas pinturas preparadas para el exterior tienen una mayor complicación que el tradicional óleo. En este sentido, la alcaldesa apunta que “Leo nunca ha estado sola, siempre hemos estado mujeres acompañándola y ayudando a limpiar pinceles y reponiendo pintura donde nos iba diciendo, pero, sobre todo, ha llamado la atención de todos los vecinos que pasaban y le explicábamos lo que estábamos haciendo”. La respuesta ha sido “muy positiva” entre los vecinos, que aconsejan trasladar esta iniciativa a otros pueblos “porque es una forma de rehabilitar embellecer, y concienciar”.
Con dicho proyecto y los pocos recursos económicos con los que se han contado, María Ortega ha manifestado sentirse “muy orgullosa, pues se han logrado grandes objetivos: demostrar que para ser alcaldesa no hay que estar percibiendo sueldo alguno, que con esos recursos, por pequeños que sean, si se cuenta con las personas, se pueden hacer grandes cosas, y a la vez hacer denuncia pública de uno de los grandes males que aquejan a nuestra sociedad”.
La alcaldesa no ha querido dejar pasar la ocasión para agradecer la implicación de todas las personas que han colaborado en esta iniciativa, “ya que a ellas ha sido posible”, a la vez que anima al resto para continuar actuando en otros espacios del pueblo también necesitados de actuaciones, y para los que desde otras administraciones solo reciben indiferencia.