Según el concejal socialista, se ha demostrado a través de los informes elaborados por el Ayuntamiento y por la Demarcación de Costas, que la playa “se deteriora” como consecuencia de dicho acontecimiento. De esta manera, argumenta Román, se garantizaría la “salubridad de los gaditanos”. El socialista afirma que con esto no están criticando el dispositivo de limpieza ya que “somos conscientes de la cantidad ingente” de recursos que se destinan para limpiar las playas, “pero creemos que ésta puede ser una solución factible para todos”.
Román indicó la necesidad de velar por el mantenimiento del “recurso medioambiental y turístico más importante de Cádiz”.
El PSOE pide que al menos se discuta la propuesta y, de llevarse a efecto, que se consensúe previamente con las entidades vecinales, recreativas y sociales.
Este año participaron en las barbacoas del Carranza entre 70.000 y 75.000 personas, 5.000 más que el año pasado. No obstante, el dispositivo de limpieza consiguió peinar la playa en un tiempo récord, ya que a las 10.15 horas se había completado el grueso del trabajo. En total se recogieron 65 toneladas de residuos, a una media de casi un kilo por persona.
Ese mismo día el Ayuntamiento llevó a cabo los pertinentes análisis de la arena, antes y después de la celebración, para comprobar si se había producido algún tipo de contaminación en el entorno, como consecuencia de las barbacoas. Como en ediciones anteriores, a finales de octubre probablemente el Consistorio se reunirá con la Demarcación de Costas, que también hace sus muestreos, para comparar resultados y sacar conclusiones con el objetivo de mantener la calidad de la arena.
Este año, las barbacoas se saldaron con la muerte accidental de un joven sevillano, Byron Castro, que se autolesionó con un arma blanca. A pesar de ello, el teniente de alcaldesa, Juan José Ortiz, felicitó a los asistentes por su comportamiento, pues, al contrario que en ediciones anteriores, este año no se produjeron desperfectos en la zona acotada para el desarrollo de las barbacoas. Entre otras cosas, esto se debió al fuerte dispositivo de vigilancia que se dedicó a las barbacoas y a la campaña de concienciación de los días previos.
