Una sola toma de contacto entre los representantes de
Tranvías de Cádiz y el comité de empresa para la negociación del convenio colectivo, caducado en 2020, ha bastado para que la plantilla haya decidido, por abrumadora mayoría,
iniciar paros parciales a finales del mes de mayo (los días 23,25, 27 y 30, así como el 1 de junio, de 7.30 a 9.30 y de 19.30 a 21.30 horas),
e indefinidos, a partir de 3 de junio. concretamente
“La empresa nos dice que las directrices del diálogo las marcan las
reuniones de las patronales y el Gobierno en Madrid”, sostiene, indignado,
Manuel Góngora, portavoz de los trabajadores. “
Tenemos convenio propio, no podemos estar condicionados y los compañeros han dicho que
ya está bien de esperar”, agrega.
Góngora indica que el comité de empresa ha puesto sobre la
mesa mejoras sociales, pero también un
incremento salarial que palie la pérdida de porder adquisitivo por la desorbitada subida del IPC. “Hemos puesto
nuestros riñones durante la crisis sanitaria”, indica gráficamente para justificar una demanda que, en cualquier caso,
no supera el 3%.
Tranvías de Cádiz, sin embargo,
no parece por la labor de considerar la propuesta de una plantilla que cuenta con 232 empleados, medio centenar de ellos eventuales. “La empresa
se ampara en la caída de los viajeros en la ciudad de Cádiz y entre la capital y San Fernando, de en torno a un 25%”, pero el Ayuntamiento asume el déficit de la explotación. La licitación del nuevo contrato, se malicia, también podría llevar a la concesionaria a eludir la negociación.