La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Cádiz juzga este jueves a un joven acusado de un delito de elaboración de moneda falsa, ya que supuestamente creó una cuenta en una sucursal bancaria con el resultante de cambiar a euros diez dólares que eran "burdas fotocopias a color" elaboradas por él mismo. Asimismo, habría tratado de crear una cuenta en otra sucursal con 935 dólares elaborados con el mismo sistema. La Fiscalía pide para el procesado cuatro años de prisión.
Según el escrito de calificación fiscal, al que ha tenido acceso Europa Press, los hechos tuvieron lugar en marzo de 2007, cuando el acusado supuestamente acudió a una sucursal bancaria de la localidad gaditana de Chiclana de la Frontera y, con ánimo de obtener un beneficio injusto, abrir una cuenta corriente entregando un billete de cinco dólares y otros cinco billetes de un dólar.
Tras ser convertidos a euros a través del sistema de divisas, arrojó un importe de 1,91 euros tras detraer el importe de las comisiones reglamentariamente reguladas, importe que el procesado reintegró a su patrimonio en su totalidad.
El empleado de la sucursal se percató poco después de que los billetes del procesado carecían de valor legal, al tratarse de "burdas fotocopias a color imitando los billetes de dólar", extremo que el acusado conocía porque se habría encargado él mismo de crearlos "valiéndose de un ordenador personal y del programa informático Photoshop".
Con dicho programa, habría retocado las imágenes de los billetes de dólar "obtenidos de Internet", y una vez guardadas de esta forma en su ordenador, fueron impresas mediante "una impresora doméstica" en formato DIN A-4, procediendo posteriormente "a recortar con unas tijeras los billetes obtenidos" y poniéndolos de esta forma en circulación "a sabiendas de la absoluta falta de autenticidad de los mismos". La entidad bancaria no reclama por concepto alguno en relación a estos hechos.
SEGUNDO INTENTO
Según el escrito de la Fiscalía, valiéndose del mismo artificio, el procesado habría intentado un día más tarde abrir otra cuenta en una sucursal bancaria distinta ubicada en la misma calle. En dicha ocasión, supuestamente entregó a un empleado de la sucursal un total de 187 billetes de cinco dólares, a fin de que fueran convertidos mediante el sistema de divisas a 795 euros.
En este caso, el acusado no logró el objetivo al percatarse el empleado de la sucursal de que los billetes que le estaban entregando para ingresar en la cuenta eran "burdas fotocopias a color".
Según ha apuntado la Fiscalía, el procesado llevó a cabo estos hechos "afectado parcialmente en sus capacidades volitivas e intelectuales".
Así, ha considerado que estos hechos son constitutivos de un delito de elaboración de moneda falsa, por lo que, concurriendo la circunstancia eximente incompleta de alteración mental, solicita una pena de cuatro años de prisión para el acusado, así como una multa de 800 euros.
El escrito del Ministerio Público recoge que la pena privativa de libertad deberá ser sustituida en la forma descrita en el artículo 101.1 y 104 del Código Penal a fin de que el procesado cumpla la pena en el centro que se estime adecuado a la enfermedad que sufre.
