El Teatro Moderno acogerá este viernes, a partir de las 21,00 horas, uno de las citas ya clásicas en la ciudad, el concierto a cargo de la Orquesta del Mozarteum de Salzburgo, dirigida por el sanluqueño Juan Rodríguez Romero, que acude a su encuentro anual con el público de Chiclana, después del éxito cosechado el año pasado.
En esta ocasión, el repertorio que interpretará estará compuesto por la obertura “L' Italiana in Algeri”, de Rossini, el Concierto para violín y orquesta Op.64 en Mi menor, de Mendelsson, y la sinfonía número 35 “Haffner”, de Mozart.
Fundada en 1974 por profesores de Salzburgo, Linz y Viena, paradigma de las formaciones austríacas, y con la presencia del pianista y compositor Juan Rodríguez Romero, la Mozarteum ha recorrido Europa entera dando cuenta de su calidad como orquesta y sus repertorios clásicos.
Por su parte, Juan Rodríguez Romero es director de orquesta, pianista, compositor, catedrático del Conservatorio Superior de Música "Manuel Castillo" de Sevilla, académico numerario de la Real Academia de Bellas Artes 'Santa Isabel de Hungría' de Sevilla y Académico Correspondiente de la Real Academia de Bellas Artes 'San Fernando' de Madrid. Ha dirigido conciertos en toda Europa y EEUU, realizado grabaciones para la radio y la TV española y extranjeras, grabaciones discográficas como director (incluyendo composiciones propias) con diferentes orquestas europeas.
El precio de las localidades es de 15 euros, con un 20 por ciento de descuento para los amigos del teatro.
Café chino
Ya el sábado, a partir también de las 21,00 horas, las tablas del Moderno servirán para acoger la representación de la obra de Ira Lewis “Café chino”, con la presencia de dos grandes de la escena española, Manuel Galiana y Ander Hormaza, ambos de dilatada carrera y gran reconocimiento entre el público por sus interpretaciones en el mundo del teatro, el cine y la televisión.
“Café Chino” cuenta la historia de Héctor y Julián, un par de amigos que añoran convertirse en reconocidos escritores. A través de estos dos personajes, Ira Lewis denuncia la violencia y lo irrisorio del éxito en las ciudades, nuestro asentimiento a sus códigos, la miseria normalizada.
Esta pieza de un único acto, sostenida por un diálogo brillante y por dos excelentes personajes, es en definitiva una comedia dramática de dos artistas fracasados haciendo balance de sus vidas y de su amistad. Aunque el teatro ha recogido en muchas ocasiones crisis de parejas o conflictivas relaciones familiares, son menos las historias que abordan el deterioro y la fragilidad de la amistad con la credibilidad y acierto con que lo hace “Café chino”.
Son cerca de las dos de la madrugada cuando Héctor, interpretado por Asier Hormaza, un escritor de 43 años que lucha por abrirse camino, irrumpe en el apartamento de su amigo Julián, Manuel Galiana, un fracasado fotógrafo que ronda ya los sesenta. Héctor acaba de ser despedido del restaurante donde trabaja como camarero y su situación, tanto sentimental como económica, es un desastre. Viene para reclamar a Julián un dinero que le debe, pero sobre todo para conocer la opinión que a éste le merece su última novela. Sin embargo, Julián ni tiene dinero ni ha leído su novela.