La lesión de Maye y la expulsión de Dani Henríquez provocaron que el extremo Joselito tuviera que defender la portería blanca durante un cuarto de hora. A pesar de ello, el conjunto que dirige Bolli arañó un punto que puede ser decisivo a final de temporada, puesto que el equipo aún tiene opciones de luchar por la permanencia, al mantenerse a seis puntos de su último rival, al cual le gana en el goal average particular.
Sin embargo, para mantener las opciones de seguir, un año más, en la categoría, los chiclaneros deben lograr la victoria en casa ante el Mairena, que aún lucha por acabar entre los cuatro primeros. El encuentro se disputará el domingo a las 12 horas, después de que el conjunto sevillano no accediera a adelantar el encuentro al sábado, debido a incompatibilidad profesional de varios de sus futbolistas.
Todo lo que no sea lograr los tres puntos provocaría que la remontada de la segunda vuelta sufriera un duro parón en la segunda quincena del mes de marzo, tras sólo lograr un punto en los dos últimos encuentros ligueros.
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Para este encuentro, Bolli tendrá la duda hasta última hora del guardameta Maye, que tuvo que abandonar el terreno de juego el domingo por problemas en su pie. La baja definitiva de Dani Henríquez por sanción obligará al canterano chiclanero a forzar su recuperación e, incluso, disputar el partido infiltrado.
Además del problema en la portería, el técnico blanco tampoco podrá contar para el choque ante el Mairena con Paquito Sánchez, lesionado ante el Atlético Sanluqueño, al igual que Emilio, que no pudo estar ante el filial del decano del fútbol español.
Con todo ello, Maye estaría en portería; Alberto, Ati, Javi Panés y Eric formarían en la defensa; Germán, Carlitos, Antoñito y Joselito ocuparían las cuatro plazas del centro del campo; mientras que Kike volverá a acompañar a Ñoño en el necesitado ataque chiclanero.