El Ayuntamiento de La Línea ha dado su palabra de rectificar y finalmente no utilizará agujeros simples en la tierra para deshacerse de los vertidos fecales y residuos que producen el asentamiento de feriantes durante la feria de la ciudad.
Tras la voz de alarma dada por Ecologistas en Acción Verdemar, la alcaldesa Gemma Araujo accedió a reunirse con los ecologistas con vistas a lograr una solución satisfactoria.
Así, la reunión se produjo ayer por la mañana y Araujo se ha comprometido ante el presidente de Verdemar, Alfredo Valencia, a que no se utilizará el sistema tercermundista de enterrar directamente en el subsuelo los residuos. Hasta siete agujeros ya preparados habían contabilizado los ecologistas en días pasados.
Araujo, que estuvo acompañado por el teniente de alcalde Francisco Espada, se comprometió a que se iba a instalar en el lugar de los agujeros recipientes totalmente impermeabilizados y aptos para su vaciado posterior.
Desde Verdemar se ha acogido el compromiso de Araujo con “satisfacción, aunque con la lógica cautela”, señaló a este diario Alfredo Valencia.
“Estamos muy agradecidos a la alcaldesa que nos haya recibido y que tenga esta disposición a solucionar esta barbaridad medioambiental; esperamos que no ocurra como el año pasado y éste tengamos una solución”.
Y explicó Valencia “el uso de agujeros sin ninguna protección es un verdadero atentado medioambiental; los vertidos de fecales y de residuos químicos que se utilizan habitualmente en la limpieza de las caravanas van directamente al subsuelo; es una acción totalmente tercermundista impropia de una feria de una ciudad como La Línea”.
Y añade Valencia “además también presenta un grave problema de seguridad, puesto que estos agujeros no están vallados y se encuentran en una zona de paso hacia el recinto ferial por lo que cualquier persona podría caer en ellos en un despiste”.