Pirata, la perra de cuatro meses de la barcelonesa Naomi Galiano, tendrá que seguir encerrada tres meses más debido a que, pese a que el análisis de sangre ha determinado que no tiene la rabia, ha dado un valor inferior al 0,5 exigido en el test serológico. Esto quiere decir que la vacuna contra esta enfermedad no está haciendo el efecto adecuado sobre el animal.
Por ello, en su nueva visita al PIF, acompañada por su padre, les informaron de que es necesario que la perra permanezca otros tres meses aislada, además de que tendrá que volver a ser vacunada y habrá que realizarle un nuevo test en aproximadamente un mes. Sin embargo, dado que el animal no está contagiado con la rabia, se estudia su posible traslado a otras instalaciones en Barcelona, lugar de origen de la joven, de 22 años, para que pase allí el resto del periodo de cuarentena.
Naomi ha permanecido las dos últimas semanas en Algeciras a la espera de poder llevarse a su perra, que carecía de dicho test cuando regresaban de un viaje a Marruecos, por lo que el animal fue aislado.
Ahora están a la espera de localizar unas instalaciones adecuadas en Barcelona, de la realización del transporte y de que las autoridades sanitarias de la Generalitat de Cataluña apruebe el traslado.