El obispo de Córdoba, monseñor Demetrio Fernández, ha presidido este lunes la celebración solemne de la santa misa por la festividad de San Rafael, al que ha pedido por las instituciones, las autoridades locales, el cuerpo local de la policía y por las familias, especialmente por las de "los barrios estructuralmente pobres, los que están por debajo de los umbrales de la pobreza y señalados en las listas de la pobreza de España y Europa". Al respecto, el obispo ha dicho nadie es culpable de esta situación, "pero sí todos somos responsables de que desaparezca".
La ciudad de Córdoba ha rendido culto a san Rafael en el día de su festividad con la celebración solemne de la santa misa presidida por el obispo y concelebrada por miembros del Cabildo Catedral. En esta celebración, el alcalde de Córdoba, José María Bellido, ha hecho entrega del bastón de mando al Custodio en cumplimiento de un acuerdo plenario de 1971 por el que se distinguió al Arcángel como alcalde perpetuo de la ciudad.
El obispo, según recoge un comunicado de la Diócesis de Córdoba, ha dado las gracias al Custodio por la protección ofrecida históricamente a Córdoba durante guerras y terremotos, también durante la pandemia, para que miremos "al futuro con esperanza y con tantos bonitos proyectos, que hagan que la ciudad pueda crecer no solo en el aspecto material y social, sino también en el conocimiento de Dios" porque San Rafael "es un signo de la cultura actual que define a Córdoba".
Así, monseñor Demetrio Fernández ha abogado por el acercamiento a Dios y a San Rafael "que viene especialmente a hablarnos de Dios y a decirnos que Dios no es un estorbo: es una necesidad para el progreso", ha expresado.
Durante su homilía, el obispo ha recreado el profundo arraigo de la devoción del pueblo de Córdoba a san Rafael, concretada en la figura del padre Roelas cuyas revelaciones del Arcángel permitieron situar las reliquias de los santos mártires de Córdoba en la actual basílica de San Pedro de Córdoba, donde se veneran. Una devoción que hace que la ciudad vibre con san Rafael en el día de su fiesta, ha reconocido el Obispo. En este día festivo, el obispo ha llegado a la Iglesia del Juramento para dar gracias al Custodio, "pendiente de todos para protegernos" especialmente en este tiempo de pandemia en el que "hemos sufrido mucho".