El técnico del Athletic Club, Marcelo Bielsa, ha emitido un comunicado en su perfil de Facebook en el que acepta que la directiva del club vasco desautorice su control de las obras de la ciudad deportiva de Lezama, pero no que aseguren que falta "a la verdad", por lo que declara que lo ocurrido modificará su "forma" de relacionarse con la Junta Directiva.
"He analizado y discutido con todos los integrantes de la Junta Directiva el contenido del comunicado que emitieron. Puedo aceptar que me desautoricen, pero no que, indirectamente y sin demostrarlo, se indique que falto a la verdad. Lo ocurrido modifica la forma de relacionarnos", afirmó el entrenador argentino. "Puedo demostrar que cada una de las cosas que dije se corresponde con hechos concretos y verificables", declaró en relación a los hechos acaecidos en las instalaciones de Lezama.
Bielsa no elude ninguna responsabilidad. "Asumo cualquier reclamación añadida que se origine por mi condición de empleado del Athletic Club", afirmó, a la vez que pidió responsabilidades. "Yo creo que los recursos que se instrumentaron para advertir los posibles errores, evitarlos y reclamar por ellos no funcionaron adecuadamente. Si nadie se equivocó, ¿por qué el primer equipo no dispone en el tiempo y la forma acordados de las instalaciones donde se realiza la pretemporada?", afirmó el actual entrenador del Athletic.
En relación a si peligra su puesto, Bielsa ha dejado claro que continuará, pero que a partir de ahora su relación con los dirigentes del club se reducirá a José María Amorrortu, actual director deportivo. "Puedo seguir desarrollando mi tarea como hasta ahora. La figura del director deportivo resuelve las situaciones que debo derivar. Mantengo el compromiso que asumí con la institución", concluyó el preparador de Rosario.
El entrenador del Athletic de Bilbao salió el pasado jueves en rueda de prensa para criticar el estado de las obras de Lezama, un proyecto que consideró "una estafa, un robo y un engaño". Además, confesó que había mantenido una acalorada discusión con un responsable de las obras y que acabó sacándole "a la fuerza" del lugar, un hecho que provocó que el argentino acabase 'autodenunciándose'.
El viernes, el club desautorizó al entrenador argentino y aseguró que las obras se estaban desarrollando con normalidad. La polémica se saldó con una reunión de Bielsa con la Junta Directiva, tras la que no hubo declaraciones hasta que este lunes decidió hablar el técnico rosarino.