Ecológicos pero no tanto

Los últimos datos de la Encuesta Social del Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía reflejan que los sevillanos, como el resto de los andaluces, han ido asimilando de forma progresiva fórmulas de gestión cotidiana, en sus hogares, más respetuosas con el medio ambiente y todos los índices reflejan un comportamiento cada vez más tendente al ahorro y eficiencia de los recursos, además de una mejora en el tratamiento de los residuos y emisiones que genera un hogar. La provincia encabeza la generación de electricidad procedente de la energía solar en proporción muy superior al resto de la región y está entre las primeras en todos los aspectos relacionados con el reciclado de residuos (papel, vidrio o latas) o el uso de recursos tan básicos como el agua. Sin embargo, ese comportamiento positivo no se ve reflejado con la misma intensidad en la preocupación por el medio ambiente. Los datos no colocan a Sevilla muy alejada de la media regional pero sí la sitúan por debajo y a bastante distancia de los que más se preocupan, que son los gaditanos, con casi ocho puntos de diferencia. A pesar de que en el comportamiento cotidiano el sevillano parece aceptar una gestión de los recursos y un uso de los mismos más ecológicos que otros andaluces, la concienciación ante el cambio climático o los peligros que acechan al medio ambiente flaquea, aunque es peor en granadinos o almerienses.