El estado en el que se encuentra la plaza Hermano Ignacio provoca una nueva denuncia de los vecinos y padres de los alumnos del colegio La Salle, ya que día a día sufre mayor deterioro.
Las losas sueltas son el mayor problema que denuncian los usuarios de esta plaza, que suponen un peligro para los viandantes.
Además, apuntan que no solo acuden a la zona los alumnos del colegio y sus padres o tutores, sino que es una zona muy transitada debido a la cercanía de la residencia de ancianos. Asimismo, los ancianos que pueden salir del centro también pueden correr la mala suerte de tropezar o protagonizar un accidente debido al mal estado de las losas, que no solo están sueltas, sino además muchas están incluso rotas, por lo que faltan hasta varias planchas completas en el suelo de esta céntrica plaza.
Pero otro aspecto que preocupa a los usuarios es el estado de los bancos. Varios de ellos no están aptos para que nadie se pueda sentar, y además, denuncian que el estado general de la plaza tampoco invita a que “nos llame la atención a sentarnos. Esta plaza ha cambiado mucho en los últimos años, y está abandonada a su suerte, porque el Ayuntamiento no viene para nada”, explica M. G.
Por otro lado, la queja se dirige a la fuente que se encuentra en el centro de la plaza. Lo que con anterioridad era una señorial fuente, en los últimos años se ha convertido en un “vertedero”, al que no solo van a acudir los restos de basura o aquello que mueve el viento, sino además que es un lugar idóneo para que los incívicos echen “todo lo que se encuentran en la plaza”, desde los restos de losas sueltas o rotas, hasta basura, etc.
Se trata de una fuente muy preciada para los vecinos, según informan a este medio, pero confirman que su estado es “lamentable”.
Y además, se trata de las pocas plazas con las que cuenta el centro de la ciudad, “y en vez de cuidarla, los políticos miran hacia otro lado, pasando de ver los desperfectos que tiene la plaza y los que se van uniendo a los que ya son clásicos”, explican.
Por ello exigen al Ayuntamiento que “se den una vuelta por la plaza” y constaten los desperfectos que tiene y le busquen una pronta y rápida solución.