Los cinco acusados, que en un principio habían reconocido que tenían intención de secuestrar un barco, dijeron ayer que cambiaron de planes cuando tras tres días en el mar se les estropeó la embarcación.
“El motor estaba roto, no teníamos comida ni agua, yo estaba enfermo y después de tres días en el mar, decidí olvidarme de cualquier secuestro de barcos y pedir ayuda”, declaró ante el juez uno de lo acusados, Abdirisaq Abdulabi.
Otro de los somalíes encausados, Osman Musse, declaró que salió al mar “para secuestrar un barco, pero una vez en el mar tuvimos problemas y cuando vimos el barco (antillano) le pedimos ayuda con las manos en alto, pero no nos creyeron”.
Un tercer acusado afirmó que “ellos nos atacaron a nosotros, disparándonos cuando les pedimos ayuda”.