El PSOE mantendrá las indemnizaciones por despido actuales --20 días por despidos procedentes y 33 días por despidos improcedentes-- mientras los agentes sociales no pacten unas nuevas, aunque sí revisará por decreto nada más llegar al Gobierno la causalidad del despido y del contrato temporal.

   Así lo ha explicado en una entrevista con Europa Press el responsable de Economía del Grupo de Expertos del PSOE, Jordi Sevilla, quien ha insistido en que la reforma laboral de 2012 se derogará progresivamente, comenzando "de manera inmediata" por las partes que serán sustituidas por una nueva legislación decidida por el Ejecutivo de Pedro Sánchez.

   Esta parte incluye aspectos como revisar la causalidad de los contratos temporales o del despido objetivo, así como lo que afecta al "principal perjuicio" de la reforma 'popular', es decir, al equilibrio negociador entre las partes para "recuperar la negociación colectiva" y que los "necesarios mecanismos de flexibilidad se puedan usar no porque lo decida el empresario 'manu militari' sino porque se negocie".

   "Me preocupa cómo se llega a los elementos de flexibilidad. Hay negocios que seguramente necesitan de esa flexibilidad, pero nosotros estamos diciendo que se negocie en convenio y que, por tanto, se puedan pedir cosas a cambio. Puedo estar dispuesto a aceptar un régimen de jornada partida pero, a cambio de eso, dame una compensación de algún tipo", ha explicado.

NO HABRÁ DECISIÓN UNILATERAL

   Por contra, hay otros aspectos de la actuar regulación laboral que el PSOE no quiere tocar "unilateralmente", lo que incluye por ejemplo las indemnizaciones por despido, a los que se invitará a "alcanzar un acuerdo a través de la negociación".

   "El coste del despido queremos dejarlo en manos de los interlocutores sociales. En Democracia se ha fijado tres veces el coste del despido, y sólo el Gobierno del PP lo ha hecho unilateralmente. Nosotros no lo haremos unilateralmente", ha insistido Sevilla.

   No obstante, también señala que con el actual nivel de paro "es mucho más preocupante cómo se contrata que cómo se despide" y que en este momento no cree que haya "empresarios que, queriendo contratar, no lo hagan por este asunto".

"SE LES HA IDO LA MANO"

   A renglón seguido, el exministro de Administraciones Públicas ha admitido que la situación anterior a 2012 "tampoco" les gustaba, porque "seguramente los trabajadores y los comités de empresa tenían demasiado poder de veto" pero cree que con la reforma del PP se ha dado "demasiado poder discrecional" a los empresarios.

   "Se les ha ido la mano en un sentido muy de derechas y muy de fortalecer la posición negociadora del empresario y precarizar mucho la de los trabajadores. Eso es lo que queremos contrarrestar", ha abundado, proclamando que "con el PSOE los empresarios tendrán menos poder de decisión unilateral" y que eso "no es ir contra de la empresa" sino en contra de la "arbitrariedad de los empresarios".

PLAN DE EMPLEO QUE GENERE MAS DE LOS 500.000 PUESTOS DEL PP

   Por otra parte, Jordi Sevilla no ha aclarado qué objetivo de creación de empleo se marcan para la próxima legislatura, aunque sí asegura que los 500.000 puestos de trabajo al año que promete Mariano Rajoy son los derivados simplemente del ciclo económico, con un crecimiento del PIB que el PSOE cifra en el 2,5% anual y el Gobierno en el entorno del 3%.

   "Sólo con ese crecimiento se va a crear empleo, gobierne quien gobierne. Pero no es suficiente. Y nosotros nos rebelamos contra la idea de Rajoy de que ya hemos hecho lo que había que hacer, hemos plantado el árbol y ahora hay que esperar simplemente a que crezca. Pero hay mucha gente en España que no tiene tiempo para esperar y, por tanto, habrá que hacer algo especial para acelerar la creación de empleo", ha señalado el dirigente socialista.

   Y ese "algo especial" será un plan de empleo que el PSOE presentará en los próximos días y que recurrirá a "todas las herramientas" para atajar la "emergencia social" del paro y la pobreza, incluyendo las Políticas Activas, la formación de los jóvenes, la colocación de parados o los incentivos fiscales.

   Y, junto a todo ello, pondrán en marcha un Ingreso Mínimo Vital que, dotado con 6.000 millones de euros, permitirá que unos 700.000 parados con menores a su cargo cuenten con una prestación no contributiva mensual para combatir la pobreza y la desigualdad.

CONVOCAR EL PACTO DE TOLEDO

   Por otra parte, Jordi Sevilla también ha avanzado que una de las primeras medidas que el PSOE tomará en la próxima legislatura será convocar al Pacto de Toledo para abrir un debate sobre los ingresos de la Seguridad Social, que han quedado muy mermados "por las políticas laborales" del Gobierno, que han causado importantes caídas de las cotizaciones.

   En ese debate, los socialistas pondrán sobre la mesa la creación de un nuevo "impuesto finalista" con el que financiar las pensiones contributivas, una idea que se tratará junto con otras como "reducir hasta eliminar" las bonificaciones a las cotizaciones sociales que paga la Seguridad Social para incentivar la contratación, que deberían sustituirse por subvenciones pagadas con los Presupuestos.

   En cualquier caso, el PSOE no cree que la quiebra de la Seguridad Social de la que alerta el Gobierno sea inminente o "ni siquiera de la próxima legislatura", aunque ha reconocido que en este tipo de materias hay que tomar decisiones "con tiempo". Su idea en este sentido es debatir durante seis meses, aprobar medidas a finales de 2016 y aplicarlas desde el ejercicio siguiente.

   "Y nuestro compromiso con las pensiones es tan fuerte que, si hiciera falta, se harían transferencias desde el Tesoro Público para garantizar el pago de las pensiones. No hay ninguna duda", ha añadido.

   En cualquier caso, parece que los socialistas no reabrirán el debate sobre la edad de jubilación, manteniendo así el retraso progresivo hasta alcanzar los 67 años en 2027. La revisión del sistema de actualización también se dejará en manos del Pacto de Toledo, con la única premisa de que se "debe garantizar el poder adquisitivo de los pensionistas", algo que a su juicio no hace el índice de revalorización que se aplica actualmente.