El secretario de Acción de Gobierno, Acción Institucional y Programa de Podemos y candidato de Unidas Podemos al Congreso por Zaragoza, Pablo Echenique, ha abogado este sábado por recuperar los fondos del rescate de la banca para afrontar una eventual crisis económica.

En declaraciones a los medios durante un acto en Parla, Echenique ha considerado que "la pregunta fundamental" de esta campaña es "qué hará el próximo Gobierno de España si viene una nueva recesión económica".

Ante esta eventualidad, Unidas Podemos plantea adoptar medidas "para que la banca devuelva los 60.000 millones que les prestamos todos los españoles", una cifra que el Banco de España reduce a algo más de 40.000 millones de euros, ya que parte de las ayudas (más de 20.000 millones) fueron sufragadas por el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD), que se nutre de aportaciones de los propios bancos.

En concreto, Echenique ha citado "un impuesto a la banca, un impuesto a las transacciones financieras" que en 10 años permitiría recuperar la totalidad del rescate, según sus cálculos.

Además, el candidato ha reclamado al presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, que aclare si está pensando implementar en España la mochila austríaca (cuenta personal del trabajador para financiar su indemnización), que en su opinión sería una "vuelta de tuerca" a la reforma laboral del PP.

En materia política, Echenique ha reclamado que Unidas Podemos tendría que estar en un futuro Gobierno socialista porque es la "única manera" de evitar un pacto entre PSOE y PP, y porque "si no formamos parte del próximo Gobierno de España posiblemente el conflicto catalán va a peor".

Ha instado a "dejar de hacer aspavientos" en torno al "problema catalán" y emprender un diálogo político, porque la vía policial y judicial no lo va a resolver.

"El presidente Sánchez tendrá que decidir si prefiere la vía represiva de (Pablo) Casado y (Albert) Rivera o decide apostar por el diálogo", ha inquirido.

Asimismo, Echenique ha defendido el papel de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, en el conflicto, ya que ante la "mala" gestión de la Generalitat de Cataluña, ella "ha demostrado altura de miras, sensatez, capacidad de diálogo y un respeto a la institución".