Una romería y una "misa" en la antigua iglesia para celebrar el día de la Inmaculada ha puesto en alerta a la Archidiócesis de Granada
El joven Antonio Jiménez, arzobispo de la iglesia Veterocatólica de Santa Filomena y que se presenta como exorcista en sus redes, presidió 'oficios' en el antiguo templo de Tablate, un municipio de Granada abandonado hace casi tres décadas que ha activado la alerta de la Archidiócesis.
Una romería y una "misa" en la antigua iglesia para celebrar el día de la Inmaculada en Tablate, un pueblo abandonado hace tres décadas pero en recuperación, ha puesto en alerta a la Archidiócesis de Granada, que ha pedido a sus feligreses que se desvinculen de estos actos.
En un comunicado emitido este lunes, el vicario general de la Archidiócesis, Enrique Rico Pavés, ha recalcado que los cultos se han realizado en la antigua iglesia de Tablate, "actualmente desacralizada y propiedad de un particular" y que los ha dirigido un "supuesto obispo" que no pertenece a la Iglesia Católica ni representa a la Archidiócesis de Granada".
La romería y la posterior misa, según recoge la Asociación Tablate Histórico que organizó los actos, han estado presididas por Antonio Jiménez, un joven arzobispo que usa Chamuel como nombre religioso y que representa a la Iglesia Veterocatólica de Santa Filomena.
En diferentes perfiles de redes sociales y en su canal de Youtube, con un centenar de vídeos, Jiménez se presenta como arzobispo y como exorcista y asegura haber "liberado" a más de 400 personas poseídas.
Fuentes del Arzobispado de Granada han explicado a EFE que la iglesia Veterocatólica no tiene vinculación alguna con la Católica y que este representante no se ha presentado en la Archidiócesis ni ha comunicado su presencia en la provincia, como sí hacen habitualmente representantes de otros credos por mera cordialidad.
Las mismas fuentes han precisado que el comunicado busca evitar confusiones o malentendidos entre los fieles, que podrían creer que participan de un sacramento católico sin que sea así, y busca prevenir cualquier engaño o equivocación.
Además del comunicado, en el que la Archidiócesis ha recalcado que la ceremonia se ofició en un templo propiedad de un particular y desacralizado desde la década de los noventa del siglo pasado, los sacerdotes de la zona profundizarán en el mensaje entre los feligreses.
El templo que ha servido de escenario para la ceremonia es propiedad de Ibán de María Guardiola, un hombre de 35 años que compró el antiguo templo al Arzobispado de Granada junto a otros bienes de Tablate y que impulsa la recuperación de este núcleo.
Guardiola, que antes de liderar la recuperación de Tablate ingresó en la congregación de los Fossores de Guadix (Granada), frailes que cuidan del cementerio que poco después abandonó, creó una asociación para recuperar este poblado, con medio centenar de voluntarios que cada fin de semana limpiaban la zona.
Esa asociación se ha dividido porque parte de los voluntarios creen que busca con engaños lucrarse del proyecto de volver a dar vida a Tablate.
La Asociación Amigos por Tablate, que se ha desvinculado de Guardiola, ha remarcado en su perfil de redes sociales que fue él el encargado de convocar "esta rareza".
"Guardiola va a conseguir que dejemos de venir a reconstruir Tablate. Nos está haciendo daño. ¿Ahora es veterocatólico? Hemos visto cosas de ese supuesto obispo, especialista en exorcismos... ¿Eso es una secta?", se han preguntado.