Más de 60 personas, entre responsables del metro de Granada, la Agencia de Obra Pública, fuerzas de seguridad, operativos de emergencias y figurantes voluntarios, han participado en el simulacro de un arrollamiento a una persona en patinete eléctrico que circulaba en el tramo en superficie del Parque Tecnológico de la Salud (PTS) y que había quedado atrapado bajo la cabina del conductor del tren.
La consejera de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda, Rocío Díaz, ha estado presente junto a la alcaldesa de Granada, Marifrán Carazo, y el delegado del Gobierno andaluz en Granada, Antonio Granados, en este ejercicio que sirve para "estar preparados ante posibles incidencias, como que se produzca un accidente por cruzarse un patinete eléctrico mientras circula el metro".
Esta actividad permite "poner a prueba el Plan de Autoprotección del Metro de Granada y ayuda llevar a cabo la explotación comercial del metro en óptimas condiciones de seguridad", según ha agregado la titular de la Consejería de Fomento, que ha agradecido el trabajo y el interés mostrado por los profesionales que han participado en un simulacro que se realiza con carácter anual desde 2017, pero que ha cobrado más dimensión y difusión en los últimos años.
El simulacro comenzó sobre las 0,45 horas de este martes, cuando un técnico de mantenimiento del metro dio la voz de alarma al Puesto de Control Central (PCC). El ejercicio se ha llevado a cabo en un tramo en superficie fuera de horario comercial para no entorpecer la explotación del metro.
Desde el PCC se procedió a avisar al servicio de emergencias 112, que ha coordinado la implicación de todas las fuerzas de seguridad y sanitarias que han formado parte del dispositivo y han llevado a cabo la evacuación de los viajeros (figurantes) de la unidad accidentada.
Ya que se trataba de un accidente simulado de nivel 3, con heridos graves y con la necesidad de acudir a los servicios externos de seguridad, los responsables del servicio de operaciones del metro restringieron la circulación de los trenes en el tramo entre las dos paradas limítrofes, Dílar y Parque Tecnológico, y simularon el establecimiento de bucles de circulación entre Albolote-Nuevo Los Cármenes y otro entre Sierra Nevada-Armilla.
Además, los bomberos asumieron en un momento de la noche la dirección de la emergencia, con el fin de realizar los ejercicios de estabilización y elevación de la unidad accidentada para sacar al patinete y su conductor (un maniquí) de debajo del tren, realizando el rescate del accidentado, que fue atendido por los servicios de emergencia y trasladado a un hospital.
Durante el pasado mes de noviembre, los bomberos han probado específicamente y de cara a este simulacro, los equipos de elevación de altas cargas. Con ello pudieron elevar la unidad y sacar el patinete arrollado.
Concretamente, los bomberos utilizaron una pieza novedosa de aluminio, fabricada expresamente para el rescate de personas en caso de ser arrolladas por el metro. Es una técnica de elevación con puntales, que se ha practicado por primera vez con trenes.
Este ejercicio de emergencias se ha llevado a cabo con el principal objetivo de poner a prueba el Plan de Autoprotección del Metro de Granada y comprobar, igualmente, la eficacia de actuación y comunicaciones de las fuerzas de seguridad y sanitarias coordinadas a través de Emergencias 112 de la Junta de Andalucía.
La mitad de las personas implicadas en el simulacro pertenecen a la operadora del Metro de Granada y la Agencia de Obra Pública de la Junta de Andalucía, que gestiona el metro; la empresa pública de emergencias sanitarias 061, que ha atendido a los heridos; el servicio de Bomberos y el Cuerpo de Policía Nacional, que han ayudado en la evacuación, así como la Policía Local, que ha regulado el tráfico en superficie, y miembros de Protección Civil de la provincia de Granada, así como miembros de Emergencias 112 Andalucía.
El resto eran voluntarios que han ejercido de pasajeros del metro y que han sido evacuados tras la voz de alarma. Durante la emergencia se realizaron labores de puesta a tierra de la catenaria (supresión de la tensión de energía en la zona afectada) como medida de seguridad en el tramo afectado por el accidente y el rescate del conductor que había quedado atrapado bajo el tren por parte de los bomberos.
Sobre las 1,30 horas del martes el supervisor del Puesto de Control Central de Metro de Granada comunicó el fin de la emergencia y la vuelta a la normalidad de la línea.
