El secretario general del PP en la provincia de Granada, Jorge Saavedra, ha lamentado este martes lo que a su parecer era un "secreto a voces: la traición, el engaño y el ninguneo a los granadinos, una vez que ha quedado demostrado" que la designación para localizar la Agencia Estatal de Supervisión de Inteligencia Artificial (Aesia) respondió, ha agregado, a una decisión "arbitraria y sectaria" por parte del Gobierno de España.
Así se ha pronunciado el dirigente popular en una nota de prensa tras conocerse este pasado lunes la desestimación por parte del Tribunal Supremo del recurso del Ayuntamiento de Granada contra el acuerdo del Consejo de Ministros, de 5 de diciembre de 2022, por el que se eligió a A Coruña como sede física de la Aesia.
"Ha sido el Alto Tribunal, cuya decisión respetamos, quien certifica lo que ya sabíamos: que había sido una decisión discrecional, justo lo contrario que defendieron desde el primer día", ha lamentado el también primer teniente de alcalde en Granada, que ha exigido al PSOE a que dé explicaciones de lo ocurrido preguntándose si sus dirigentes "van a seguir manteniendo que el proceso se llevó a cabo de manera objetiva".
"Hoy mismo el Partido Socialista en Granada, su secretario general, José Entrena, y el portavoz en la capital, Paco Cuenca, deben pedir disculpas y explicar a los granadinos qué opinan tras conocerse que sus compañeros del Gobierno central han vuelto a ningunear a nuestra ciudad lastrando su desarrollo, su presente y su futuro. Es llamativo el silencio atronador que sigue manteniendo el señor Cuenca 24 horas después".
Saavedra ha explicado que la de Granada era la mejor candidatura tras el enorme esfuerzo de los que se "dejaron la piel" para ello, a lo que se sumó la ilusión colectiva de los granadinos que se vio truncada, ha proseguido, por "el sectarismo y la discrecionalidad de un Ejecutivo que ni cree ni ha creído nunca en el potencial de nuestra provincia".
Asimismo, ha incidido en que fue el propio Pedro Sánchez el que situó a Granada como el epicentro de la IA durante una intervención en la ciudad para después, "por la puerta de atrás, darnos otro portazo con nocturnidad y, lo más grave, engañando a la sociedad granadina queriendo vender una transparencia que ha brillado por su ausencia en todo este lamentable proceso".
