El principal acusado de asesinar de dos disparos a corta distancia a un anciano y de intentar matar a otras dos personas en un cortijo de Santa Fe, ha asegurado que lo hizo para salvarle la vida a su hijo cuando la víctima mortal cargó su escopeta y le encañonó en la cabeza.

Lo ha hecho en el arranque del juicio que se celebra en la Audiencia de Granada y que empezó este lunes con la selección del jurado popular y las cuestiones previas.

Según el relato de hecho de la Fiscalía, el suceso comenzó pasadas las 21.00 horas del 10 de febrero de 2021 cuando dos jóvenes comenzaron una discusión en la parada del autobús de El Jau, núcleo de Santa Fe (Granada).

Ese enfrentamiento terminó en una persecución en coche que condujo a los dos jóvenes, acusados de delitos de lesiones, hasta el cortijo Villa Josefina, en el que los dos protagonistas de la pelea y otros conocidos comenzaron una agresión mutua.

El ruido provocado por el tumulto y el intercambio de golpes alertó a los dueños del cortijo, una pareja tíos de uno de los jóvenes, a los que disparó el padre del otro implicado y principal acusado, en prisión provisional por esta causa.

Este procesado ha explicado que acudió al cortijo solo y después de que le avisaran de que su hijo necesitaba ayuda porque lo iban a matar.

Se personó en la escena del crimen armado, aunque ha asegurado que su intención solo era "asustar".

"No quería matar a nadie, solo llevarme a mi hijo de allí", ha apuntado el procesado, que ha descrito que cuando llegó al cortijo estaban "apaleando" a su hijo, que tenía la cara llena de sangre, por lo que disparó al aire para pedir que le soltaran.

"Cuando el hombre cargó la escopeta y le puso el cañón en la cabeza disparé", ha relatado el procesado, que se enfrenta a una petición de cárcel de la Fiscalía de 44 años y 8 ocho meses de cárcel por un delito de asesinato, otros dos de asesinato en grado de tentativa y uno más de tenencia ilícita de armas.

El primo de este procesado, al que la acusación particular considera colaborador necesario, ha relatado que también fue al cortijo solo y que allí recibió un golpe con una pala que le hizo caer al suelo, desde donde vio una escena que ha descrito siguiendo el mismo relato que el principal acusado.

Por otra parte, el sobrino de la víctima mortal ha asegurado que el principal acusado se plantó ante su tío, "un hombre de setenta años que no estaba armado", y le disparó "a bocajarro" antes de hacerlo también contra su tía y su primo, heridos en el enfrentamiento.

Ha asegurado además que todo comenzó como una discusión entre chavales a golpes y que, después de los disparos, se quedó intentando taponar la herida de su tío hasta que llegó la Guardia Civil.

El juicio, con sesiones fijadas hasta el viernes, continuará este miércoles con declaraciones de testigos y periciales.