Les juzgan por secuestrar y torturar a un hombre tras un chivatazo sobre drogas

La Audiencia de Granada juzgará este viernes a siete acusados de secuestrar, golpear y amenazar a una víctima para que dijera quién les había delatado ante la Guardia Civil por tener droga, víctima a la que usaron como saco de boxeo y a la que atacaron con armas de fuego y armas blancas.

Según el escrito provisional de acusación de la Fiscalía, al que ha tenido acceso EFE, los hechos se remontan a la tarde del 14 de agosto de 2018 cuando uno de los acusados llamó a la víctima y quedó con él para hablar en su vivienda, ubicada en Churriana de la Vega (Granada).

Sin embargo, en la vivienda estaban seis de los acusados, armados y con los papeles repartidos para extorsionar y golpear a la víctima, a la que sentaron en una silla y ataron de pies y manos antes de empezar a golpearle.

Le explicaron en ese momento que querían saber quién le había contado a la Guardia Civil que cultivaban droga y le anunciaron que estarían golpeándole hasta obtener una respuesta satisfactoria.

Además, llevaron un cubo de agua a la sala para despertar a la víctima cada vez que perdía la consciencia por los golpes, momento en el que volvía el interrogatorio.

Los seis acusados utilizaron una pistola, una hoz y un machete para amenazar a la víctima, a la que dieron puñetazos y patadas.

Como no lograban su objetivo, lo trasladaron en un vehículo a otra vivienda ubicada en Santa Fe, un trayecto en el que continuaron las agresiones.

Allí, y delante de la séptima acusada, utilizaron a la víctima como saco de boxeo para darle golpes con guantes incluidos, le introdujeron una bala en la boca, le golpearon en la cabeza con una pistola y le agredieron con un cuchillo.

Sin obtener información sobre la droga, le obligaron a ingerir dos litros de cerveza antes de dejarlo en la puerta de urgencias de un hospital de Granada con la amenaza de dañar a su familia si no decía que las lesiones se las había hecho de manera accidental.

La víctima sufrió hematomas, erosiones, traumatismo craneal y facial y diferentes fracturas por el cuerpo.

La Guardia Civil registró las viviendas escenario de los hechos y localizó dos pistolas, tres escopetas, un hacha, una hoz, una catana, una defensa extensible y varios cuchillos.

La Fiscalía ha calificado los hechos como un delito de detención ilegal por el que ha interesado una condena a cada uno de los siete implicados de tres años y medio de cárcel.

Ha sumado un delito de lesiones, con uso de armas y ensañamiento, por el que ha pedido cuatro años más de prisión, y un tercer delito de amenazas, penado con otro año de cárcel.

Ha interesado además la prohibición de comunicarse o acercarse a menos de 500 metros de la víctima durante tres años.

Los siete procesados serán juzgados por estos hechos mañana viernes en la Sección Primera de la Audiencia de Granada.