El delegado de Salud y Consumo de la Junta en Granada, Indalecio Sánchez-Montesinos, ha afirmado este martes que la Escuela Andaluza de Salud Pública (EASP) seguirá en la ciudad "sin resquicio a la duda" y de una manera "más productiva, más integrada y más participativa", así como "aún más reforzada", en referencia a su integración en el Instituto de Salud de Andalucía, organismo de nueva creación en el que se integrará.
En un audio remitido a los medios, tras las críticas de representantes políticos como el portavoz socialista en el Ayuntamiento de Granada, Paco Cuenca, y responsables sindicales sobre el futuro de la EASP, el delegado de Salud y Consumo, Indalecio Sánchez-Montesinos, ha hecho estas declaraciones a fin de que puedan servir para "cerrar" los ejercicios de "falta de rigor" que ha indicado que está apreciando en algunas opiniones vertidas en estos días".
La EASP dejará de ser una sociedad anónima para pasar a "pertenecer a una institución pública como es la Junta de Andalucía", según ha detallado Sánchez-Montesinos, que ha explicado que el Gobierno andaluz prosigue una senda que ha venido desarrollando en los últimos cinco años para reforzar la escuela, que "seguirá con sus funciones como hasta ahora".
Lo hará, ha proseguido el delegado, "aún más reforzada, con más proyección y con total respaldo de sus trabajadores", además de con "reforzamiento de las actividades de la escuela en docencia, investigación, consultoría e internacionalización en salud pública", las cuales seguirán en Granada.
También la dirección de la escuela, que ahora mismo ocupa Blanca Fernández-Capel, seguirá "en Granada como hasta ahora", ha precisado el delegado, quien ha aprovechado la ocasión para solicitar "a los que siembran este tipo de incertidumbre que enfoquen su energía en sumarse a solicitar y trabajar en todos los ámbitos para que la sede de la Agencia Estatal de Salud Pública" radique también en la ciudad de la Alhambra.
Ha llamado en este contexto a que la ciudad no se vea expuesta a una situación similar a la que vivió con la elección de la sede de la Agencia Estatal de Supervisión de la Inteligencia Artificial, también de nueva creación en el ámbito nacional, a la que aspiraba Granada y que se ubicará en A Coruña.
