El Ayuntamiento regula así la aplicación de las medidas accesorias de suspensión temporal de licencias en caso de infracciones
El Ayuntamiento de Granada endurecerá el control de las terrazas para facilitar la convivencia y sancionará incluso con la retirada de la licencia a los establecimientos que reiteren su exceso de mesas, una apuesta para blindar el modelo tradicional de tapeo y evitar las molestias del ruido.
Granada ha aprobado este viernes dos instrucciones aclaratorias sobre la aplicación de la ordenanza que regula la ocupación de vía pública con terrazas y estructuras auxiliares y la de autorizaciones urbanísticas y actividades, dos cambios que buscan afinar el modelo hostelero de la ciudad, referente andaluz en tapas y gastronomía.
El Ayuntamiento regula así la aplicación de las medidas accesorias de suspensión temporal de licencias en caso de infracciones, una respuesta a los establecimientos que de manera reiterada incumplen la norma.
Las modificaciones prevén suspender la licencia hasta quince días cuando se monten más mesas de las autorizadas o vuelvan a instalarse en contra de la decisión municipal, una medida que en casos graves puede conllevar que se retire la licencia por el resto del año.
La alcaldesa de Granada, Marifrán Carazo, ha explicado que la medida incluye un procedimiento administrativo en el que se garantizará la audiencia del interesado, una acción consensuada con la Federación Provincial de Empresas de Hostelería y Turismo para favorecer la convivencia entre las terrazas y los vecinos y ordenar el uso de los espacios públicos.
Ha añadido que el Ayuntamiento busca así favorecer la accesibilidad y la convivencia y suma nuevas medidas cautelares para que se cumpla la normativa.
El presidente de los hosteleros de Granada, Gregorio García, ha mostrado la disponibilidad de la Federación a colaborar para regular una actividad de especial relevancia en esta capital andaluza para que no se convierta en un centro "vacío y tematizado".
"Las terrazas embellecen la ciudad, muchos rincones y calles son recuperadas para uso público", ha recordado García, que ha apostado por mantener estos espacios limpios, decorosos y siempre adaptados a la legalidad vigente.
Los cambios también regulan el horario de las terrazas, que en invierno se extiende hasta la medianoche, una hora más los viernes, sábados y vísperas de festivo, con multas de hasta 3.000 euros.